Devoto.(+21)

Capitulo 36.

Las promesas se cumplen.

42 horas antes.

Adrien.

Me siento embriagado o drogado, el pecho me arde y siento que algo va mal, muy mal.

Algo tengo que buscar pero no se que es.

Abro los ojos y la luz blanca me hace volver a cerrarlos, ¿Dónde carajos estoy? 

Lentamente vuelvo a abrirlos y el niño frente a mi abre los ojos de manera que parece sapo, ¿por que esta en mi misma cama?

-!Mama¡- la voz le tiembla, parece que esta viendo un espectro.

Lamo mi labio inferior, estoy seco y siento que me han pegado un tiro pero en la frente.

-!Adrien¡- la mujer se me tira al pecho y mi mano viaja a su cabello negro y lacio. Un dolor agudo aparece cuándo se recarga de mas en mi.

Inspecciono el lugar y al parecer es una sala de hospital bastante grande, pareciera una suite del hotel mas lujoso. 

Muevo mi cuello, mis manos y mis piernas. Quiero levantarme y andar.

-¿Cuanto tiempo ha pasado?- mi garganta esta seca y tengo que tragar y carraspear para sentirme un poco mas aiviado.

-Casi una semana amor- la mujer acaricia mi cabello y sus ojos grises claros chocan con los míos, el tono obscuro debajo de sus ojos es bastante intenso "seguro no ha dormido en todos esos días" pienso.

-Necesito espacio- con mi pierna tiro al niño de la cama.

-Imbécil- me dice en un susurro y sonrió.

-!!Seth¡¡ ¿Qué te he dicho de esas palabras?- por un momento recuerdo a Dylan.

-Pero mama, me tiro de la cama-

-Ve y llama al medico- le pide y me quedo mirando mi al rededor.

-Quiero un traje negro y un café cargado- le pido al hombre que entra, no me detengo a mirarlo.

-Señor...- Carlos es otro que parece que vio alguna aparición.

-Te estoy ordenando algo-

-Si señor- sale de inmediato con una sonrisa.

-Ni creas que te dejare salir hoy, acabas de salir del coma Adrien- las cejas de la mujer se hunden y yo ruedo los ojos.

-¿Cuantos años tengo?- su mirada se enfurece aun mas.

-Veintiocho años donde yo siempre te he cuidado y hoy no será la excepción-

Dejo que sostenga mi mano y entra a la habitación una mujer vestida con una bata blanca. Me da mi diagnostico, me chequea cada parte de mi cuerpo y me pide mover los músculos comenzando por los pies hasta teminar con el rostro.

-Veamos señor Karuma, se apoyara de Mak- señala a otro doctor y este se acerca- se sentara y luego vamos a levantarlo de la cama con cuidado y lenta...-

Me siento sin problema estirando la espada y esta cruje, no hacer nada mas que dormir por una semana esta jodido. El doctor me da su mano y la ignoro sacando mis piernas de la cama. Me coloco de pie y todo el cuerpo me pesa.

Todos los ojos están sobre mi y comienzo a caminar con un poco de dificultad pero a medida de que avanzo mi cuerpo se libera un poco.

-Bueno, ya estoy completo. Gracias por sus servicios mi lacayo les pagara-

-No puede salir aun y la cuenta ya esta pagada señor- me indica la doctora.

Busco la mirada de mi madre y esta niega  ¿Quién carajos pago?