De La Fantasía A La Realidad- Una Historia Polin

Capítulo 24-3

Penelope quería creerle, de verdad quería, pero tenía las voces en su cabeza como la de Cressida, y su séquito, incluso la de su ex mejor amiga Eloise, diciéndole que ella era muy poca cosa para Colin.

-No tienes que tomar una decisión ahora, puedes ir a casa, leer mi bitácora, verificar las cartas, y me dices después.

-Colin, yo creo que nunca voy a estar 100% convencida.

-eso no está mal -Pen lo miro confundida- no me tienes que creer, pero puedes dejar que te corteje, casarte conmigo, viajar en nuestra luna de miel, vivir en esta casa, hacer el amor todos los días, tener a nuestra hija, viajar, escribir tu panfleto, todas las temporadas que quieras, tener a nuestro hijo, viajar, escribir tu novela, ayudarme a encontrar mi pasión aparte de mi familia, tener más hijos , luego cuando ya estemos viejitos y canosos. Recordarás este momento y dirás, el tercer Bridgerton de verdad me amaba.

Penelope sonrió

-Sabias que si tenemos un barón primero que mis hermanas, el heredará el título de lord Featherington.

-enserio?

-Si.

-que bueno que primero tendremos a nuestra hija, realmente espero que tus hermanas nos ganen.

-no te gustaría? -pregunto Penelope confundida.

-no lo quiero para mi, para mi hijo menos, me gustaría que tuviera que hacer algo más en la vida que solo ser un lord.

-podriamos quedarnos solo con Ágatha.

-Agatha? Como Lady Danbury?

-que? Siempre me ha gustado.

Colin se acerco, esta vez Penelope no se alejo.

El beso fue con una intensidad tal, que tuvieron que separarse por unos segundos para respirar, el tercer Bridgerton, le miró sus ojos, su nariz su boca.

-te amo- lo dijo y la volvió a besar.

El reloj sonó a las doce.

-Pen tienes que irte a casa, pronto llegará tu familia, mañana asegúrate de salir a pasear al parque con lady Featherington, volveré a pedirte permiso para cortejarte. Si vuelves a decir que no. Yo te juro señora Bridgerton -recordo a Ágatha en su sueño y sonrio-

-que pasará si vuelvo a rechazar te? -pregunto burlona.

-volvere pasado mañana, y el día siguiente, y el que le sigue hasta que me digas que si. Pero por favor fuera de bromas, no me vuelvas a rechazar, de verdad que ya no lo aguantaría.

-no te preocupes mi amor, nunca más.

Colin sintió un calor en su corazón.

-de ahora en adelante Pen si te sientes insegura o no sabes que creer, me lo dices, sin importar lo que escuches.

-de acuerdo -sonrio Penelope.

-me lo prometes?

-te lo prometo.

Penelope entro al carruaje seguida de Colin, quien la acompaño a casa Featherington.

-tambien me quiero disculpar.

-porque -dijo Penelope confundida.

-no tienes nada que escribir para mañana.

-a veces pasa, luego hago un resumen con lo que Eloi... -Pen recordó de pronto.

-voy a escuchar lo que pueda en casa y en el local de Mondrich, mañana te daré mi resumen. En cuanto a Eloise, también estoy en ello, no te preocupes.

-oh Colin, eres el mejor -Penelope lo besó.

Llegaron al destino de Pen, quien bajo sigilosamente y entro por la puerta de empleados, afortunadamente su familia no había llegado, y no había nadie ningún sirviente cerca. Entro a su cuarto con la bitácora de Colin en sus manos. Se puso su ropa de dormir, encendió una vela y se dispuso a leer.

Edimburgo, día 1

He llegado con pocas esperanzas al puerto Leith, encontrar a mi buena amiga entre tantas personas no va a ser algo sencillo, pero debo mantenerme positivo, mi pesimismo no será de ayuda, lo primero que hice fue contactarme con mi amigo el señor Brown, es quién tiene contactos en todas partes, pero ni siquiera el se siente positivo con nuestra travesía. El dibujo que mi hermano Benedict hizo de ella, nos ha sido de ayuda, pero al no capturarla en detalle nos hemos encontrado con una pared, varias personas dicen haberla visto, pero todos hablan de alguien distinto, quince damas de buena cuna que viven por todo el territorio de este hermoso país. Quisiera que un adivino, me dijera cuál es la correcta para saltarme toda esta locura.

Penelope se enternecio al leer las palabras de Colin quiso saltarse al final, antes de que la encontrará.

Edimburgo día 48

Hoy fue la sexta mujer que seguí la pista pero no era mi Pen, no entiendo porque la confundieron, lo único en lo que se parecían era en el color de cabello, mi Pen es cien veces más hermosa e inteligente, aquella muchacha no sabía ni juntar dos frases.

Se notaba que Colin había dejado la escritura.

El señor Brown me dio una idea, ya que este es el primer viaje en barco. De Pen, seguramente se habría mareado, por lo que volveremos al puerto para preguntar si habían bajado del barco a una hermosa señorita que se viera enferma o en brazos. Al pensar en esto me molesta no haber estado con ella para enseñarle mis trucos para no marearse, espero que en su próximo viaje podamos hablar sobre eso. He botado la lista, porque estoy muy seguro de nuestra pista, creo que estamos cerca.

Penelope escucho las voces de su familia, por lo que se apresuró a guardar el cuaderno de Colin debajo de la cama, apagar su vela, y hacerse la dormida.

-como que no ha llegado señora Varley, ni siquiera fue al baile. -dijo Portia

No se escuchó nada.

-ya reviso su habitación? -momento siguiente Lady Featherington abrió la puerta con suavidad, vio a su hija dormida y volvió a cerrar la puerta.