De La Fantasía A La Realidad- Una Historia Polin

Capítulo 54

Hacerle los masajes para drenar era la parte más difícil de su día, por eso siempre esperaba que su familia ya hubiera terminado la visita, pero Eloise era la excepción, ambas damas podrían estar horas hablando y nunca se quedan sin tema de conversación. Esa noche en particular, había pensado que su hermana ya se había ido, pero escucho la conversación más íntima de las dos.

Realmente se alegraba de saber que su esposa por fin había entendido cuanto la amaba.

Cuando escucho que ya habían terminado de conversar entro a la habitación y se dispuso a hacer el masaje, como siempre empezó con la pierna izquierda, echando el aceite haciendo círculos en la pierna, luego la planta del pie, al hacer contacto visual con Pen la sangre se le empezó a calentar, tanto que sintió como su miembro se ponía duro, estuvo a segundos de besarle las piernas, cuando Penelope le tiró una almohada encima de su miembro, haciendo que Colin recordará que su hermana seguía ahí.

Al verla sintió como el calor se le subía a las mejillas, rogaba a todos los cielos que no se hubiera dado cuenta, pero Eloise se veía perdida, como si estuviera reconsiderando su vida.

-Eloise -le dijo, ella no reaccionó.

-Eloise -la llamo Penelope.

-Eloise! -dijo Colin subiendo un poco la voz.

-si? -respondió El como si se hubiera despertado de un sueño -que?

-vas a comer aquí? O pido un carruaje?

-ya, me voy -dijo.

Colin dejo la pierna de su esposa en la cama, se levantó y sintió como la almohada se caía, recordó que todavía estaba duro bajo ella, por lo que la alcanzó antes de caerse, la mantuvo contra el hasta que tocó el timbre, se volvió a sentar, esperando que su hermana fuera inocente y no entendiera el por qué de sus movimientos.

-porque -alcanzo a decir El cuando entro el señor Cornelius

-señor?

-Cornelious eres tan amable de arreglar un carruaje para mi hermana.

-si señor, algo más?

-eso sería todo, gracias.

El mayordomo salió de la habitación.

-bueno, será mejor que me vaya -anuncio Eloise.

-El! -la llamo Colin antes de que desapareciera tras la puerta .

Eloise volvió a la habitación.

-te llevas el panfleto, déjalo ahí doblado, ya me encargaré yo de llevarlo.

-no le tocaba a Benedict?

-no, está muy ocupado buscando a la mujer de plata.

-Entiendo.

Eloise dejo el panfleto en la mesa de noche bien doblado y se fue.

-Crees que se dio cuenta? -pregunto Colin preocupado.

-no creo, se veía bastante distraída -sonrio Pen complice- porque te emocionas tanto?

-tus caras -sonrio Colin mirando hacia abajo- son las mismas que haces cuando te beso aquí -señalo su vagina.

-claro que no -dijo Penelope riendo.

-te voy a poner un espejo en el techo, para que veas que es verdad.

-y como le explicamos a los demás cuando lo vean?

-a mis hermanos les encantará la idea.

-Colin! No quiero que tus hermanos sepan lo que hacemos.