DEUDA [KOOKMIN] +18

CAPITULO 1

- no...por favor no, se lo ruego - suplicó el hombre con decesperacion, siendo tomado por dos tipos de traje negro quienes tomaban a aquel hombre de ambas manos con la intención de evitar que este escapara

Sus ojos reflejaban miedo y decesperacion sin tener alguna salida de escape.

Estaba jodido

¿Como mierda saldría de esta?

Cuyo hombre siendo sostenido miraba a su jefe quien de una manera relajante y sin piedad, se encontraba sentado sobre su fino sofá de cuero, con las piernas sobre encima de la otra, mientras que en una de sus manos llevaba en cigarro para después llevarlo a su boca, dando una calada.

Jungkook observaba con detenimiento el sufrimiento y miedo que transmitía de aquel hombre mayor.

Quería una segunda oportunidad, quería salir de aquí.

Y claro que eso jamás pasará.

Para Jeon Jungkook...no existen las segundas oportunidades.

Sentía tanta satisfacción de escuchar los ruegos que esté lanzaba, pidiendo que no le hicieran daño, hasta el punto de que sus lágrimas resbalaran de sus mejillas.

Que escena tan exquisita de ver.

- ¿Tienes mi dinero? - volvió a preguntar Jungkook de un tono tranquilo sin apartar la mirada fría de la victima, dando una calada más a su cigarro

Park Dong-Sun agachó la cabeza negando levemente.

Lamentablemente no tenía el dinero.

- no señor...no lo tengo - musitó el alzando la mirada

Eso fue suficiente para que Jungkook a los pocos segundos se levantara de su cómodo sofá y caminara lentamente hacia Dong-Sun.

Una ligera tensión se presenció en aquella sala casi oscura.

El hombre mayor sentía como su piel se le erizaba al ver la cercanía de su ex jefe estando frente a frente, los ojos de Jungkook se apreciaban maldad y frialdad, a lo que de Dong-Sun solo se veía miedo, mucho miedo, que su cuerpo comenzaba a temblar.

- detesto a las personas cuando no cumplen lo que prometen - protestó Jungkook en un murmullo, con aquella voz ronca - ¿Sabes que les pasa a esas personas? - esta vez su mano fue hacia su bolsillo, deslizó hacia arriba, mostrando una filosa arma

Un acto suficiente para que la víctima empezara a respirar con dificultad sabiendo perfectamente lo que pasaría con su vida.

El filo del cuchillo fue deslizándose por todo su rostro aciendo que el hombre se sienta cohibido ante la acción del pelinegro.

- señor Jeon...

- ¿No lo sabes? - continuó con la tortura - ¡las personas que no cumplen con su palabra son víctimas de usar mi cuchillo! - sentenció Jungkook mirándolo de reojo, sintiendo el miedo que corría por todo su ser

Dong-Sun solo pudo serrar los ojos con fuerza esperando su final.

Sería en vano seguir suplicando, sería en vano gastar lágrimas.

Jungkook era un ser despreciable con un corazón negro, incapaz de sentir pena por sus víctimas, alimentándose y con la satisfacción de oír aquellos gritos desgarradores mientras pedían que pararan con la tortura. Sin embargo para Jeon Jungkook era una razón más para seguir con su trabajo lentamente mientras sus víctimas iban perdiendo la vida de a pocos.

Cortando los rostros de estos con su filoso cuchillo.

Oh.

Como disfrutaba del sufrimiento.