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“Ustedes dos, entren en ese círculo”, les dije a la pareja. Hippolyta y Jeanne son las dos chicas que participarán en esta expedición de campo.

Honestamente, preferiría que esos tontos entregaran a la chica sin necesidad de intercambiar golpes... Bueno, más bien, darles una paliza, ya que el equipamiento que he preparado para ellos los matará sin mucha molestia, y la mayoría Lo más importante es que iré allí a mitad del día.

Aún así, la posibilidad de que entreguen a esa chica Tepes es pequeña o nula, principalmente debido a su orgullo. Quinella hizo varios millones de cálculos sobre esto y hay alrededor de un 87% de posibilidades de que digan que no.

“Está bien…” Tanto Jeane como Hippolyta entraron en el círculo. Muy pronto comenzaron a ser escaneados.

“Entonces… umm… ¿Qué es esta luz?” Jeanne preguntó con curiosidad mientras miraba la luz que comenzaba a surgir del círculo.

“Estoy tomando tus medidas. Una vez finalizado el escaneo, recibirás tu equipo militar de la SPBA”, les dije mientras revisaba las lecturas de las dos chicas.

Simplemente aprendiendo sus tres tallas y comprobando su peso también... Estoy aprovechando cualquier oportunidad que puedo para aprenderlas.

Unas cuantas pulsaciones más tarde me di cuenta de que iban a parecerse a cazarrecompensas mandalorianas.

Un poco caliente por sí solo.

"Mencionaste esto antes, pero ¿qué es la SPBA?" Preguntó Hippolyta mientras miraba su mano y veía la luz bañándola. Subiendo y bajando por todo su cuerpo.

“El Ejército Biológico Científicamente Preparado, SPBA para abreviar, son mis soldados que harán el trabajo duro por mí. Su trabajo consiste principalmente en recolectar cosas para mí. Desde Sacred Gears hasta samples. Dependiendo de la situación." Aclaré lo que mis gruñidos hacen por mí. No mucho, sólo algunos manitas.

"Espera... no mencionaste la guerra... ¿no estás planeando que ellos peleen tus guerras?" Artemis preguntó con cierta confusión al escuchar mi explicación.

"¿Alguna vez has oído hablar de algo llamado 'bombardeo orbital preciso'?" Respondí su pregunta con otra pregunta.

"¿Por qué perder la vida de los soldados cuando puedes simplemente disparar a los enemigos desde el espacio... como se esperaba de mi Señor Esposo?" Hipólita comprendió al instante lo que quería decir. A Artemis le tomó algo de tiempo procesar lo que quería decir, pero finalmente lo entendió de todos modos.

"La estación con forma de arma en el espacio... pero no puede disparar a todas partes, ¿verdad?" Ella preguntó al darse cuenta. Había algo de miedo detrás de esa pregunta.

“Puede… incluso el Inframundo o el Cielo… o cualquier dimensión más pequeña vinculada a la Tierra… Puedo disparar a cualquier lugar. Incluso reinos conectados a otros Panteones…” Dije encogiéndome de hombros mientras miraba el producto final de la armadura.

Mi mirada se dirigió a Hippolyta, que tenía estrellas en los ojos, mientras que Jeanne parecía un poco desconcertada al escucharme hablar sobre las capacidades de mi Estación clase Apsos.

Artemisa y Atalanta parecían pálidas como el papel al darse cuenta de que lo más probable era que pudiera bombardear el Olimpo con nada más que mi palabra.

Sólo Le Fay tenía cara de póquer. Puedo asumir que ella es la única en este lugar, aparte de Latia y Quinella, que revisa los registros de los proyectos...

“Bueno, las armaduras están terminadas. Échales un vistazo”.

Con un movimiento de la mano, les mostré la imagen completa en 3D de las armaduras. Parecían una armadura mandaloriana clásica, solo que la diferencia era que es una versión femenina. Lo que significa que la pieza del cofre y la armadura en sí son mucho más delgadas.

DxD: Demonios y ArtefactosOnde histórias criam vida. Descubra agora