Capítulo 24

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El viento invernal de Diciembre se hacía presente a través de los cristales del local.

No había mucho movimiento hoy en el restaurante, solo un par de personas en mesas distantes disfrutando de su recién salida comida china. Jared, Mei, Valeria y yo estábamos apretados alrededor de la barra. En estos últimos días Valeria había decidido acompañarme durante el horario de trabajo, decía que estar tanto tiempo cerca de Jason y su madre la enfermaría.

—Entonces ¿Ya pusieron fecha para la gran boda? —dijo Jared para molestar a Val, él sabía que hablar de ese tema la alteraba demasiado. Ella rodó los ojos.

—No, y ojalá no lo hagan nunca.

—¿Qué hay de malo con el novio de tu madre? —preguntó Mei.

—¡Todo! Es el típico tipo recién salido de prisión que planea su siguiente homicidio.

—Sí, claro —dijo Jared sarcásticamente —eso es súper típico.

Mei abrió grande los ojos al notar la seriedad en la voz de Valeria —¿En serio?

—Claro que no, exagera.

—¡No exagero! —exclamó la pelirroja.

—Sí lo haces. Liz, dile que exagera.

Tal vez hace unas semanas yo hubiera estado de acuerdo con Jared, pero ahora estaba realmente considerando la posibilidad de que Jason fuera un homicida... de acuerdo, tal vez homicida era demasiado.

—De hecho, no estoy muy en desacuerdo con Val —dije apoyando mis brazos sobre la barra, y sintiéndome un poco avergonzada por admitir eso. Admitir que estás de acuerdo con Valeria es como admitir que estas casi tan loca como ella.

—¡JA! —exclamó Valeria en la cara de su primo.

—Creo que estar tanto tiempo en casa de Val está afectándote la cordura, Liz.

Yo también lo creía.

—Ja-ja muy gracioso, Jared. Ahora ¿podemos hablar de algo menos deprimente?

—De acuerdo, ¿qué tal de la gran fiesta de fin de año que planeo hacer?

—¿Vas a hacer una fiesta este año? —dijo Valeria como una niña emocionada —Creí que, después de la última, no volverías a hacer otra.

—¿Qué pasó en la última? —Mei dijo antes de que yo pudiera preguntar lo mismo.

—Fue un descontrol total —Si Valeria parecía emocionada antes, ahora desbordaba de emoción.

—Fue un desastre —Dijo Jared medio afligido, al mismo tiempo que Valeria —Alcohol, drogas, sexo descontrolado por todos lados.

—Sí —rió Val —fue un gran descontrol desastroso, pero fue muy divertido.

—¡Tal vez para ti! —Exclamó Jared apuntando con un dedo acusatorio a Valeria —pero yo tuve que pagar las consecuencias.

—De acuerdo, si te quejas tanto ¿por qué harás una este año? —ella se cruzó los brazos y miró a su primo retándolo a contestar. Cuando él no contestó rápido ella sonrió —¡¿Lo ves?! Te encantó.

—Como sea ¿se apuntan o qué?

—Yo sí me apunto —Mei alzó la mano.

—También nosotras, ¿cierto, Liz?

La última vez que había ido a una fiesta, había terminado presenciando un asesinato. La idea no me apetecía demasiado, pero con una amiga como Valeria ¿cuántas posibilidades habían de festejar el fin de año en casa? Ninguna.

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