Epílogo

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Las luces de la habitación del hospital producían un irritante zumbido, era lo único que interrumpía el silencio sepulcral del lugar.

Lentamente, los azulados ojos empezaron a abrirse. Alan se sentía adolorido y cansado, las balas que había recibido no habían tocado nada que pudiera matarlo, pero aún así era muy doloroso.

Lo primero que vio fue el techo pálido sobre su cabeza, lo próximo que hizo fue intentar levantarse, pero algo lo detuvo. Lo intentó de nuevo, solo para notar que algo mantenía su mano derecha unida al espaldar de la cama de hierro: esposas.

—Alan —Cristian había estado sentado en una de las esquinas. Él habló lentamente como si estuviera intentando calmar a un animal rabioso.

—¿Qué sucede? —preguntó Alan mirando la esposa en su mano —¿Cuánto...? ¿Cuánto tiempo estuve aquí?

—Una semana.

Alan se mantuvo en silencio, con el ceño fruncido. Intentando recordar algo, él sabía que era algo importante, pero su mente parecía llena de lagunas.

—¿Qué sucedió? —volvió a preguntar. Cristian no respondió de inmediato.

—¿No lo recuerdas?

—No.

La puerta se abrió en ese momento. Un hombre bien vestido, con el cabello rubio prolijamente peinado y ojos grises; entró en la habitación. Alan se tensó, él ya conocía a Jason, pero por otro nombre. Jason miró al amigo de Alan, y Cristian pareció entender que debía irse.

Una vez solos, Jason caminó por la habitación y, detrás de él, entró otro hombre más viejo y con el cabello canoso.

—¿Cómo te sientes? —preguntó Jason.

—¿Qué hago aquí? ¿Qué sucedió?

—Creo que lo sabes.

Alan intentó recordar. Intentó nadar a través de las lagunas de su mente, buscando en lo más profundo algo que lo iluminara. Y luego encontró algo, aunque no era mucho, pero era algo.

—Liz... ¿está bien?

Jason suspiró.

—La señorita Elizabeth Greco está muy lejos de aquí.

—Eso no responde a mi pregunta ¿Ella está bien?

—Ella está bien —aseguró el hombre detrás de Jason —. Pero no es de eso de lo que venimos a hablar.

—Mi compañero tiene razón...

—Estuviste mintiendo todo el tiempo ¿cierto? —Alan ignoró las palabras de ambos hombres —¿Ethan Price?

—No te equivocas —Jason se veía tranquilo cuando sacó la placa policial del interior de su chaqueta —. Pero vamos al punto.

—Y ¿Cuál es el punto?

—Seguramente recuerdes que estuviste involucrado en labalacera de un bar de mala muerte —comenzó —. Pero hubo una muerte enparticular de la que eres el principal sospechoso —Alan no respondió,simplemente se limitó a mirarlo desconfiado —Valeria Jones fue la víctima y yovoy a hacer todo lo posible para comprobar que tú fuiste su asesino. 

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Ahora sí, es el final... del primer libro, claro xD Sí, ya he empezado a escribir el segundo libro :') y lo subiré muuy pronto.

Si llegaste hasta aquí, quiero decirte que eres realmente AWESOME!!! 
Agradezco a cada uno de los lectores que se tomaron el tiempo para leer mi primera novela, y a todos los que votaron y comentaron. No saben los ánimos que eso me daba. Quisiera darles un ponycornio a cada uno de ustedes :3 pero como, lamentablemente, los ponycornios no existen, solo puedo agradecerles virtualmente todo su apoyo :D
I LOVE YOU ALL!! 
ALL THE LOVE! :3 xD
AND I SEE YOU SOON! ;)

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