Esto es imposible | TERMINADA

" Vuelve conmigo "

POV HAYLEY

Habían pasado horas desde que ese burjo, Lenox, entró en la habitación. No salió a dar noticias ni a decirnos nada. Puso un hechizo o algo en la habitación porque no pude escuchar nada. Seguí andando de un lado a otro. Cuando me dijeron que se estaba muriendo, mi corazón se paró. No podía perderla, no a ella, no sin decirle que la quería, que si quería estar con ella y que estaba dispuesta a arriesgarme.

Penelope vino, se sentó enfrente de la puerta con Dorian, los gemelos y yo. Largo un gran suspiro y miro la puerta. Mi padre entró por el pasillo, al verme me abrazo. Comencé a llorar de nuevo. Clarisa apareció segundo después.

- Deberías ir a descansar, esto va a ir para largo y no me refiero a horas- dijo.

- No voy a dejarla sola- dije apartándose de los brazos de mi padre.

- No te digo que lo hagas, solo te pido que descanses y comas, ella no le gustaría verte asi- me señalo.

Temía razón, me descuide desde que se fue y eso no le gustaría. A mi tampoco lo hizo, pero la angustia y la preocupación de no saber, era mayor que el hambre. Al final todos nos fuimos de allí. Cada uno a su habitación, menos yo, que le hice caso y fui a por algo de comer.

Puesto que no sólo eran lobos y brujos en estés castillo, conseguí un poco de sangre en la nevera. Me bebí dos bolsas, se sintió bien, pero ninguna como la suya.
Cuando estaba a punto de salir, una brisa llegó a mi brazo. La seguí, llevándome hasta un pequeño balcón. Repose mis brazos en el, a la vez que tomaba una bocanada de aire fresco.

- Tu debes de ser Hayley- me giré para ver a la destinaría de la voz- Yo soy Celeste- se acerco.

- La diosa- dije algo sorprendía.

- Para la gente que no conozco si, pero para el resto solo Celeste- me dio una pequeña sonrisa y se puso a mi lado.

- Es un honor- dije- Aunque no sean las mejores circunstancias-

Me fije más en sus facciones. La verdad es que había rejuvenecido desde que llegó hace horas. Se veía más joven, guapa, sus arrugas habían desaparecido y ya no estaba tan delgada. ¿Qué había hecho?

- La luz de la luna- dijo.

- ¿Perdona?- me desconcertó su frase.

- La luz de la luna me da poder, por eso ya no luzco como una anciana- me miro- Puedo leer la mente ahora que parte de mi poder ha vuelto, pero tranquila, no la leo todo el rato- dijo calmada- Supongo que tendrás preguntas así que, hazmelas-

No sabía si tenía estómago para escuchar todo lo que las habían hecho ahí abajo, pero la curiosidad era más fuerte así que preginte igualmente.

- ¿Qué ha pasado en estos dos meses?- ella se sorprendió ante la pregunta, quiza querría saber otras cosas.

- ¿Con o sin detalles? te aviso, no es agradable- honestamente, me daba un poco igual.

- Como prefieras- respondí.

- Esta bien- tomó aire- Estábamos encerradas en una celda, solo había una cama, nada de luz claro o yo podría salir de allí. Nos daban comida en una bandeja y cuando les apetecía nos sacaban- dijo tranquila.

- ¿A donde os sacaban?- ella me miró.

- Otra celda- respondio- Para quitarnos el poder, nuestra fuerza vital-

- ¿Para qué? Es decir, ¿por qué la necesitaban?- no tenía sentido.

- Te voy a contar una pequeña historia- se movió hacia una esquina, cogió dos sillas y me entregó una- Hace más de 100 años, cuando se creó un ángel, encargado de dar vida a la magia blanca que se otorgó a todos los brujos, la naturaleza, para compensar ese gran poder, creo a un pequeño demonio que llevaba en él la magia negra- cruzó sus piernas- Ese demonio era el único que podía otorgarte su magia, eso sí, si la aceptabas, renunciabas a la blanca, las dos no podían coexistir en un brujo. Muchos de ellos rechazaron la blanca y aceptaron la negra, estaba bien ninguno los juzgo. Al principio ellos la usaban para el bien, curar gente, desarrollar hechizos de fertilidad, protegerse y proteger a otros sobrenaturales..., pero un día, un brujo sufrió la pérdida de su amada. Ella usaba la magia blanca, el la negra. Resultó que otro burjo de magia negra la mato, la gente dijo que fue por celos, otros porque se volvió loco, pero como todo en este mundo, unos estaban a favor de esa magia y otros en contra. Cuando el brujo supo que pasó, se reveló, comenzó a usar la magia para encontrar al responsable, matando a todo el que se ponía en su camino. El demonio al enterarse de que más gente lo usaba para atacar, matar gente, engañar, robar, etc. Decidió negarse a compartir su magia, aún así, la gente lo quiso y siguo usando al pobre demonio-