Capítulo 52

64 11 4
                                    

Claramente no pude dormir, el nuevo capitán tenía sus pies en mi espalda mientras roncaba con mi correa conectada a una batería que se activaba si me movía.

Creo que nunca entenderé su manera de ser. A veces me trata bien, me pregunta cómo estoy o me felicita. Pero la mayoría del tiempo fueron estos tratos los que me llevaba.

Incluso peores.

Era el "blanco oficial para probar armas", si no me lograban dar, entonces no servía, si sí lo conseguían, yo me llevaba un castigo por no ser lo suficientemente hábil.

Lo primero que hizo al despertar, fué patearme, lo que activó el mecanismo que me electrocutó.

No podía ocultar las orejas, la cola y lo demás. Corría tanta adrenalina por mis venas gracias a la inseguridad que se me era imposible.

No recibí nada de desayuno, algo que ya sabía que pasaría, y salimos con él afirmando mi correa.

Ya en la comisaría todos nos quedaron mirando.

-Llegó el paquete que pidió ayer... -me miró la recepcionista con miedo -¿Esa cosa es segura?

-No para los malos -se rió él caminando mientras me arrastraba.

Cerró la oficina con llave y abrió la caja encima de su escritorio revelando un traje militar.

-Siempre te viste mejor de verde -sonrió -así no te veías.

Traté de negarme a lo que sabía que pasaría, pero antes de intentar vestirme con eso me dió otro shock de electricidad dejándome en el suelo.

Me movió como si de una muñeca de trapo se trataba hasta que pude recuperarme.

Claro que para entonces ya era tarde y tenía el nuevo conjunto puesto.

Mi cuerpo se sentía agotado. El haber tenido que regenerar tanto tan rápido combinado con el estrés hacía difícil el respirar.

Me quedé en una esquina hecho bolita mientras él llamaba a unos "viejos amigos".

-Buenas noticias, estarán aquí mañana, así que tendrás el día libre para "jugar" con ellos -no quiero.

No podré resistir volver a vivir así.

-Te daré un chocolate por bien portado -otra vez eso...

No volveré a caer en esa estupidez de la dependencia a la intermitencia. No después de saber cómo es cuando alguien realmente me quiere.

-No te pongas así, hoy harás trabajo de campo y si te portas bien, te dejaré cazar algún conejo y comerlo crudo -¿Y solía pensar que eso era un premio?

Supongo que cuando er ala única oportunidad para comer...

Me eché en el suelo mirando la ventana mientras llegaban los dos policías a los que debía ayudar.

¿Eddie se desepcionaría de mí si me viera así?

¿Le daría asco?

Porque yo me doy asco.

Seguro perdería todo el respeto que Dustin y los demás niños me tienen.

-Jefe, le trajimos un... Café... -me quedó mirando el uniformado -¿Realmente nos lo vamos a llevar? Pensé que los sacrificaría o algo así.

-Buenas idea para cuando termine su propósito -mencionó el capitán mientras miraba unos documentos -recuerda dispararle, eso va a mostrar tu autoridad sobre él.

¿Es realmente necesario?

Ni siquiera he intentado escapar.

El recién llegado sacó su arma y me voló el ojo.

Creado Para EstoWhere stories live. Discover now