Por la Familia [Bellamione]

Escena Eliminada

Bella estaba atada a los postes de la cama en Nueva Delhi, y eso le parecía extraño e interesante. Siempre había odiado el confinamiento, desde Cygnus, y especialmente después de Azkaban, pero Hermione se dio una palmada en el muslo desnudo y Bella no gritó.

Un mínimo, tal vez. Hermione caminaba alrededor de la cama y sus ojos parecían hambrientos y crueles. Bella recordó haber perseguido a la chica en la oficina de McGonagall, cómo Hermione se había alejado de ella. Ahora Hermione recuperó ese poder, impulsado por el Moxy que Jamie les había dado a todos. Fue una suerte que Hermione no se hubiera inmutado ante la oferta; En verdad, debería saber qué cambios produjo la sustancia. Bella debería haber esperado este resultado, un cambio de sus posiciones habituales, y tal vez Bella no debería estar tan confundida por eso.

Había pasado catorce años en Azkaban y una semana en cautiverio en las mazmorras de Hogwarts, y el recuerdo de todo aquello era sumamente doloroso. Hermione lo sabía, y aun así caminaba por la habitación prestada, con los pantalones y las bragas quitados, y una hermosa camisa blanca y un sostén eran el único impedimento para Bella.

"¿Qué deseas?" Hermione gruñó.

" comerte el coño", respondió Bella fácilmente. Estaba seca – estar atada y sujetada era incómoda, y tenía miedo – pero esta era su esposa, la persona en la que Bella confiaba más en el mundo.

"¿Qué pasa si te violo?"

La idea parecía remotamente posible. Hermione había aprendido qué hacerle a Bella para que su cuerpo cantara, pero su cuerpo ya no cantaba. Estaba al borde del precipicio del miedo, que no era erótico, sólo aterrador.

"No", gruñó Bella.

"Está bien", dijo Hermione, y trepó por el cuerpo de Bella, presentándose, con los muslos a cada lado de la cara de Bella.

Bella buscó el clítoris en la maraña desordenada entre las piernas de su esposa, y ambas gimieron cuando lo encontró. Ella luchó contra las ataduras, queriendo acercar a su esposa, sentir carne bajo sus palmas, provocar y volverse lasciva. Sorprendentemente, Hermione ya estaba lista para la lengua de Bella, y Bella sintió que su cuerpo se activaba con el movimiento de su propia lengua contra una humedad tan acogedora.

"Te gusta esto", murmuró Bella.

"Quiero que supliques", respondió Hermione, y su coño se abrió, depositando humedad en la barbilla de Bella.

El movimiento de sus propios labios y lengua embriagó a Bella. Había pasado mucho tiempo desde que su esposa había respondido con tanto entusiasmo, y ella lo disfrutó, amando cada momento. La mano de su varita se movió con la esperanza de penetrar a Hermione, pero ella todavía estaba atada y en lugar de eso, presionó su pecho y su cuerpo hacia arriba.

Hermione se estremeció. "Más, Bella."

Bella gimió en respuesta. Ella también quería más y más profundo, y su lengua sólo podía llegar hasta cierto punto.

"Quieres que te desate", susurró Hermione.

"Quiero follarte", dijo Bella con cierta sensación de indignación.

"Fóllame con tu lengua, entonces", respondió Hermione, y Bella giró los hombros y se dedicó a la tarea.

"Hmh, no es suficiente", dijo Bella después de unos minutos.

"¿Puedo follarte con el juguete?"

"¿Atada?" Bella consideró la posibilidad. A Hermione le gustaba su juguete, y había consentido en esto antes, pero cada parte de su cuerpo aullaba para llenar a Hermione. Los instintos de Bella iban en contra de la idea de que Hermione usara el juguete con ella. Sin embargo, Hermione ya estaba muy mojada y su esposa claramente disfrutó este escenario.

"Me lastimaste", susurró Hermione al oído de Bellatrix. "Me contaminaste. Ahora estás indefenso y quiero contaminarte ".

Era difícil aceptar ser contaminado. Hermione convocó su juguete, lo insertó en su cuerpo fácilmente y apretó sus muslos para hacer que el objeto saltara.

"¿Es lo que quieres?" Bella dijo lentamente.

Hermione Granger pasó la mano por el eje del juguete y el movimiento hizo que sus caderas saltaran ansiosamente.

"¿Y todavía atada?"

En respuesta, Hermione puso sus manos sobre las piernas de Bella, separándolas y examinando su ápice. Por supuesto, comer a Hermione había solucionado el problema de la sequedad, pero a Bella no le gustaba estar expuesta así.

El objeto entre las caderas de Hermione se contrajo y goteó.

"¿Realmente quieres esto?"

"Te deseo."

"Entonces sí", jadeó Bella, y Hermione fue tan gentil como siempre, acumulando humedad en la punta, empujando el clítoris de Bella con el juguete. La única diferencia era que Bella era impotente, pero Bella sintió que una parte de ella cedía ante ello. Se sentía bien, los empujones, las manos de Hermione por todo su cuerpo. Se sentía deseada, exquisitamente. Hubo mucha lubricación entre la respuesta del cuerpo de Bella y el juguete.

"¿Estás bien?" Hermione comprobó sin aliento. "Quiero esto."

"Quiero lo que tú quieres", murmuró Bella, y luego Hermione empujó dentro de ella sin previo aviso.

Las caderas de Bella se alzaron impotentes, ofreciendo un mejor ángulo, y Hermione agarró ambos muslos de Bella y los levantó, rodando con dureza. Encontró el punto dulce que los había evadido durante años con este juguete, y el cuerpo de Bella se estremeció, lo que hizo que Hermione gritara.

"Más", gruñó Hermione, poniendo sus manos sobre las muñecas atadas de Bella. Bella mantuvo las piernas en alto, arqueándose. "Sí, dame la bienvenida."

Bella hizo un sonido primario en respuesta. Quería complacerla y Hermione estaba muy contenta por ello. Sus cuerpos emitían ruidos húmedos y ásperos. La cama dolía, pero el cuerpo de Bella sólo anhelaba.

"Más fuerte," respiró Bella.

"Eres tan jodidamente... eres... sí", Hermione se retorció por dentro y sus caderas hicieron movimientos bruscos de liberación.

Cuando terminó, Bella retorció sus brazos con las ataduras y Hermione sacó el juguete y recorrió el cuerpo de Bella hasta su clítoris.

"Nos huelo juntos", susurró Hermione contra el muslo de Bella, y succionó el clítoris de Bella con su boca.