CAPITULO 33

23.1K 1.2K 193
                                    

CONTROL

✧------------♕

Kylian

Mis nudillos los repaso contra su frente para asegurarme que no tiene fiebre, en la otra mano tengo el IPad para asegurarme de la información de Fausto que me da los detalles de la edificación que recién comienza.

La alianza con CIDFA puede beneficiarnos demasiado, yo mismo acepto que las cosas se pueden joder y no por nuestra culpa absoluta, sino por el hecho de que en este tipo de casos muchas veces tienes que tambalearte para aprender y reforzar tus puntos débiles.

Deslizo mi mano hasta su abdomen, mismo que se comienza a agitar porque Kai me siente cerca. Entre Denisse y yo optamos por seguir la tradición de los dos nombres, en el instante que me dijo que ya tenía su opción, no necesité sacarle la verdad para enterarme que quería que nuestra hija se llamada Antonella. Entre búsquedas cuando me daba recesos en medio de los estudios o el trabajo, busqué un nombre que fuera digno de mi princesa.

De mi pequeña que me la visualizo entera, con ojos azulados o como los míos y el cabello en llamas como el de su madre, tengo que prepararme para soportar a una pequeña latosa que presiento que se va a parecer a su mamá. La pequeña ya le da un par de molestias a Denisse, lo que me pone en alerta para que le toque el abdomen antes de que me haga pucheros y se suelte a llorar.

Aunque son guerreras, también ellas dos se someten a batallas cuando una no se duerme y la otra llora porque le patean los órganos. No me quejo porque sé muy bien que el embarazo no es cosa sencilla y mucho menos algo banal que todo mundo puede enfrentar sin tener una sola queja.

Con CIDFA me acabo de ganar algo, me acabo de asegurar un plazo de tiempo para que su central nos preste sus servicios y que de esa manera mis soldados no se queden sin refugio. Algo dentro de mí desde hace mucho tiempo me dijo que iba a perder la central, no me vengo abajo por la idea, en cambio, me hago más fuerte y me deshago del sentimiento que le tengo a Bretaña.

Es una manera de prepararme y que lo que sigue no sea algo que me lleve a mis rodillas sobre el suelo para suplicar, eso es algo que solo haré en privado y solo conmigo mismo porque los demás no se deben enterar de mis debilidades.

Apago por un momento el IPad para acercar mis labios a su abdomen, es tan redondo y grande que me encanta como luce. No me importa, tendré que embarazar muy seguido a Denisse porque es algo deseable, calcinante y un puto queroseno que prende mis ansias, que alebresta mi bestia interior al verla tan llena de mí y con nuestra pequeña moviéndose sin parar.

—No queremos despertarla, ¿cierto? —Le hablo, dejando que mi cuerpo se deshaga de los problemas y la tensión que he acumulado desde hace un par de meses—. Tenemos que ser amables con ella, está enfrentando cambios y también temores ya que quiere lo mejor para ti y que no sufras como ella lo hizo cuando estaba pequeña.

Una patada de su parte y yo río entre dientes, mi oreja la recargo contra su abdomen y sigo sobando para que la pequeña se tranquilice.

—Todos nos estamos preparando para recibirte, incluso Mason, tú hermano está entrenando a los perros para que te cuiden. —Mi corazón parece que está a nada de detenerse cuando doy un vistazo a todo lo que he conseguido pese a los disturbios—. Nos vas a tener a todos para cuidarte, para protegerte y amarte. Cosa que es muy importante y...

Tomo un ligero respiro para calmar este caos interno que me está agitando como si se tratara de un tornado que quiere arrancarme de todas partes y hacerme ver todo lo que he hecho y pasado por tanto tiempo.

» Siendo honesto, me alegra que mamá se haya quedado con nosotros, que haya aceptado a Mason sin que le haya obligado a tomar un papel que no le corresponde. Mamá se quedó y siempre lo hará, porque es nuestra, ella no nos va a abandonar, jamás nos dejará de amar y eso es algo que debemos agradecer pese a que no sea una costumbre nuestra, princesa.

Un paraíso en ruinas #2 Onde histórias criam vida. Descubra agora