#6: Ninguna Empatía

10.3K 630 13
                                    

Desperté en la enfermería, con un palpitante dolor de cabeza. Había una intravenosa pegada a mi mano, bombeando alguna clase de sustancia clara en mi cuerpo.

Miré alrededor por alguna clase de rostro familiar, pero no vi ninguno.

Una enfermera joven con cabello rojo y un septum se acercó a mí con una sonrisa.

"¿Cómo te sientes?" preguntó.

"Débil. Mi boca está tan seca." Respondí.

Ella caminó al lavabo y sirvió un pequeño vaso de agua y me lo entregó.

"¿Qué me pasó?" pregunté, no recordando mucho.

Todo mi cuerpo dolía.

"Eric dijo que te desmayaste después de un entrenamiento duro. Cuando testeé tu sangre, vi que estabas severamente deshidratada, asique te coloqué algunos fluidos. Has estado todo el día aquí durmiendo."

"Oh, ¿cuánto tiempo tengo que quedarme?" pregunté, ya preocupada por mi entrenamiento.

"Solo hasta que Eric llegue a llevarte." Contestó, luego ajustó mi intravenosa y volvió a su puesto.

Suspiré, mirando al techo.

Puto infierno, espero que esto no estropee mi ranking.

Oí la puerta abrirse y cerrarse en la habitación, y miré hacia adelante para ver a Eric acercándose. Él usaba su usual ceño de 'sin tonterías'.

"Medio esperaba que te desmayaras. Betsy dice que puedes irte. Dijo mientras se sentaba en la silla al lado de mi cama.

Rodeé mis ojos.

Por supuesto que no le importa si estoy bien.

"Sí, bueno, medio que esperaba correr por todo Chicago de ida y vuelta ayer pero mierda pasa."

Él medio sonrió.

"¿Quieres pertenecer a Osadía? Tienes que aguantártelo princesa."

"¿Cuánto me perdí?" le pregunté, ignorando su comentario inteligente.

"Pelea, tiro, un viaje al muro. Hablé con Cuatro más temprano, ambos acordamos que mantendrías tu mismo ranking por hoy.

"Si bueno, es lo menos que podrían hacer por ponerme en la enfermería."

Sus ojos grises se volvieron negros en un instante.

"No te olvides con quién estás hablando iniciada. Tomaría puntos por eso si no fuera por tu condición actual." Chasqueó, parándose.

Betsy se acercó rápidamente y desconectó mi intravenosa, removiendo la aguja lentamente y reemplazando el sitio con una tirita. Me levanté lentamente, tomando otro sorbo de mi agua.

"Estoy lista para irme ahora." Le dije a Eric, ya molesta por su presencia.

Él lideró el camino de vuelta a los dormitorios, ni una vez mirando atrás para ver si lo seguía. Cuando llegamos a la entrada, volteó a mirarme.

"Mañana va a ser duro. No esperes que Four o yo mostremos ninguna simpatía." Me informó.

Solo asentí.

Cuando él se volteó para irse, caminó unos pasos y luego se detuvo y me enfrentó con una pequeña sonrisa.

"Descansa esta noche, lo necesitarás."

Y con eso, se fue.

No pude evitar sonreír por sus palabras. El infame Eric había mostrado una pizca de compasión. ¿Había en realidad un corazón escondiéndose debajo de esa oscuridad de Osadía?

Iron Hide, Silk Heart | Eric Coulter Fan FicciónOù les histoires vivent. Découvrez maintenant