#24: Conclusiones

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Caminando por el desolado pasillo de camino del baño, comencé a contemplar cómo le diría a Lucy lo que estaba sintiendo. Nunca le he dicho a una chica que la amo, y en este punto de mi vida, estaba absolutamente seguro que la amaba. El sentimiento en mi pecho es casi intolerable cuando estamos separados. Solo estar con ella me hace sentir feliz otra vez, y saca lo mejor de mí. Ella me hace querer ser bueno con la gente aparte de ella.

"Hola guapo."

Ugh. Esa voz me perseguirá por siempre.

Me volteé para ver a Sarah caminando por el pasillo hacia mí, usando un pequeño vestido negro. Todo lo que podía pensar mirándola es cuán fea es comparada con Lucy, por dentro y por fuera.

"¿Qué quieres Sarah?" pregunté, molesto por su pobre intento de llamar mi atención.

Ella se colocó frente a mí y sonrió.

"Tú."

Sus manos golpearon mi pecho duramente mientras me empujaba contra la pared y mecía sus caderas contra las mías. Solo tomó momentos para empujarla y mantenerla a distancia de brazos para poder hablarle.

"Sarah, esto no puede pasar más. Estoy viendo a alguien ahora."

Su confundido ceño fruncido se volvió curioso y preguntó, "¿quién es?"

"Es Lucy."

"¿Una iniciada? ¿Eso siquiera está permitido?" preguntó.

Asentí.

"Bueno estoy feliz por ti entonces. Finalmente encontraste a alguien para aguantar tu mierda todo el tiempo."

Estaba agradecido de que Sarah sea igual de incomprensible que de molesta.

"En realidad estoy loco ahora. Estoy pensando en decirle que la amo. ¿Cómo crees que reaccionará?"

¿Qué mejor que meterse en la cabeza de una mujer que preguntarle a una?

"No sé nada sobre esa chica. No tengo libertad de responder eso."

"Espero que lo diga de vuelta."

"¿Cuándo vas a decirle?" preguntó.

"Esta noche, después de la cena."

"Está bien. No te acobardes, sé cómo eres Eric."

Después de preguntarle a un mozo dónde estaba el baño, me aventuré por el salón en busca de Eric. Él se estaba tardando mucho y Max me mandó a buscarlo. Pero mientras me acercaba al otro lado del salón que conectaba con el pasillo donde estaban los baños, escuché voces apagadas cercanas.

Mi curiosidad obtuvo lo mejor de mí y pronto me encontré inclinada contra la pared, escuchando. Eran Eric y una chica. Saqué mi cabeza y miré mientras ambos se besaban justo frente a mis ojos.

¡No! ¡Esto no puede estar pasando!

Me quité de la pared y comencé a caminar de vuelta por donde vine, mi corazón latiendo fuera de mi pecho. Pero me detuve cuando escuché sus voces subir otra vez. Sin podes escuchar exactamente lo que estaban diciendo, caminé de puntas de pie a la pared para escuchar otra vez.

"¿Cuándo vas a decirle?"

"Esta noche. Después de la cena."

"Está bien. No te acobardes, sé cómo eres Eric."

"Sí sí. No sé cómo lo tomará ella."

"Bueno tienes que decirle en algún momento."

"Lo sé. Lo haré, ¿está bien?"

¿Qué mierda?

Me animé a echar un vistazo y vi a Eric parado contra la pared, sujetando la mano de Sarah en la suya.

¡Esa comadreja! La rata de doble cara, ¡Four tenía razón! ¡Él probablemente me va a decir que está con ella! ¡Probablemente se la debe haber estado follando también!

Tomé una profunda respiración y tomé unos pasos para que me vieran. Ambos me miraban con ojos bien abiertos y Eric inmediatamente soltó la mano de Sarah.

"¡Rata de dos caras, ahora todo tiene sentido!" dije, lágrimas amenazando con caer.

"¡Lucy! ¡No, no es lo que piensas!"

No gasté un momento más ahí, y me regresé de la manera en la que había venido. Sabía que él me seguiría, asique me moví rápido y le dije a Max que me tenía que ir. Sin darle tiempo de preguntarme por qué, me fui.

Sabiendo que Eric asumiría que tomaría uno de los vehículos escolta de regreso a Osadía como hicimos cuando vinimos aquí, me fui por la ocupada cocina y me escabullí por la puerta trasera justo cuando el tren estaba pasando por el estacionamiento.

Me quité mis tacones y los sostuve en una mano mientras corría hacia el tren, corriendo a la par antes de subir a la orilla y agarrar la perilla de la puerta. Presioné el botón para abrir las puertas y entré, cayendo al frío metal y dejando algunas lágrimas escapar mis ojos.

La conversación era obvia. Él estaba planeando dejarme por ella, ¡y lo iba a hacer esta noche después de la cena! Sabía que era muy bueno para ser verdad.

Sequé mis ojos cuidadosamente con mis nudillos para no arruinar mi delineador, sollocé algunas veces y me paré. No iba a dejar que nadie viera mi dolor, mi debilidad.

El tren comenzó a andar más lento, y esperé en la puerta para que pasara la entrada trasera de Osadía, luego salté. Mis pies ardieron cuando aterricé en la grava y me coloqué mis zapatos antes de entrar a mi facción. Recibí raras miradas de gente en los pasillos mientras marchaba en dirección de los dormitorios, y me di cuenta que tendría que pasar por la cafetería para llegar allí.

Las miradas y tonos bajos me hicieron poner nerviosa mientras pasaba mesa tras mesa, y la puerta en el costado opuesto lucía más y más invitadora después de atrapar los ojos de observadores cercanos y viendo las miradas en sus caras. Debo lucir como una estúpida en este vestido.

Y ahí estaba él, parado en la puerta. Bloqueando mi escape.

Me detuve.

"Lucy." Dijo.

"No Eric. Muévete." Escupí, causando que cabezas se voltearan.

"Déjame explicar." Demandó.

"¡No, Eric!" grité, mi ira comenzando a hervir.

Todo lo que quería era acostarme en mi cama y dormir. Mi mente estaba dando vueltas con dolor y confusión. ¡Y mi final estaba a solo días! Podía oír a la cafetería callándose mientras más personas nos miraban. Lo último que quería era hacer una escena.

Eric no se movió. En vez de eso se quedó parado con sus brazos cruzados, dándome una mirada desafiante.

"Estás sacando conclusiones. No es lo que pareció."

Sacudí mi cabeza incrédula. La gran habitación estaba silenciosa ahora, y no me animaba a mirar a nadie más que el hombre parado en mi camino. Calculé mi próximo movimiento, y decidí volver por donde había venido.

Cuando me volteé, dejé a Eric, al igual que a mi corazón en esa puerta.


Iron Hide, Silk Heart | Eric Coulter Fan FicciónWhere stories live. Discover now