Iron Hide, Silk Heart | Eric Coulter Fan Ficción

#16: Celosa

La mañana siguiente fue incómoda. Me mantuve lo más lejos de Eric que pude y parecía que él hacía lo mismo.

Era una lástima que él sea tan idiota, el sexo era muy bueno. Pero si lo que Cuatro me dijo era verdad, entonces no me estaba perdiendo de nada. Decidí que solo me enfocaría en mí misma ahora, para poder pasar la etapa uno sin distracciones.

Y lo hice.

El último día de entrenamiento, quedé en la tercera posición. Había pasado la semana exitosamente sin alguna comunicación con Eric. Mientras miraba mi nombre en la pantalla, sentí un enorme orgullo.

"Bien iniciados, vayan a comer algo, luego encuéntrense con Cuatro y yo en la puerta trasera a las 7 para los juegos de guerra." Eric llamó, y todos dejamos la sala de entrenamiento juntos.

Chrissy y yo nos tomamos del brazo mientras íbamos a cenar, charlando felizmente.

En la cena, nos sentamos con Sam y Jake como de costumbre. Ellos estaban muy contentos por los juegos de guerra de esta noche. Yo también lo estaba, y secretamente esperaba que Eric estuviera aquí. Casi extrañaba ese miserable apodo que usaba para mí.

Eso era, hasta que lo ubiqué al otro lado de la cafetería.

Ahí estaba sentado, con una linda morocha sentada en su regazo. Ella no era hermosa, solo una chica normal con cabello corto color marrón. Pero la forma en la que ella pasaba sus uñas hacia arriba y abajo en su cuello hacía mi sangre hervir.

Él no tenía expresión en su cara como siempre, pero su brazo tatuado estaba alrededor de su cintura. Sé que solo compartimos una noche de intimidad borracha, si siquiera quieres llamarlo así pero la punzada de celos que comenzaba a sentir me mareaba.

¡Soy más linda que esa perra!

Cuando sus ojos encontraron los míos, bajé mi ceja y me volteé como si no me importara. No había forma de que le dejara saber que en realidad estaba celosa.

"Hey Lu, vamos a volver para prepararnos. ¿Vienes?" Chrissy preguntó.

La miré con una pequeña sonrisa.

"Estaré ahí en un minuto."

Ella asintió y se fue con Jake y Sam.

Volví a mirar a Eric y la muchacha. Ella estaba buscando un miembro de Osadía. Ella no tenía ni un solo tatuaje o piercing que pudiera ver. Me puse un piercing en mi primera noche aquí. Lo admito, fue un desafío y extremadamente vergonzoso, para Chrissy. Pero sí obtuve una reacción positiva de Eric esa noche que tuvimos sexo.

"No hay nada por lo que estar celosa."

La voz suave de Cuatro me sorprendió. Volteé mi cabeza para verlo sentarse a mi lado con una sonrisa.

"¿Huh?" me hice la estúpida.

"Eres hermosa, esa chica no tiene oportunidad." Dijo.

Ambos volvimos a mirar al par. Ella se estaba riendo de alguien en otra mesa y Eric estaba sonriendo.

"¿Realmente piensas eso?" pregunté, mirando de nuevo a Cuatro.

"Oh, definitivamente. Sarah ha estado tratando de estar con él desde el día que ella llegó aquí. No es la única, ha habido otras lo suficientemente valientes para tratar. Pero Eric las asusta."

"Hmm." Fue todo lo que dije.

"¿Estás lista para los juegos de guerra de esta noche?" preguntó.

"Sí, quiero decir, ¿qué mejor manera de liberar mi furia que dispararle a otras personas?" me reí.

"Bueno me aseguraré de que estés en mi grupo así tienes una excusa para dispararle a Eric."

"Eres tan dulce." Bromeé, y él mostró sus dientes en una sonrisa.

"Lo sé."

Le eché una última mirada a Eric y Sarah mientras me levantaba, y casi me ahogué con mi propia saliva cuando la vi sonriendo y apretando su bíceps.

Qué puta.

Cuatro y yo nos despedimos y separamos caminos. Me aseguré de trotar al lado de Eric con un movimiento extra de mi trasero.

¿Qué está haciendo esta mujerzuela en mi regazo? Le he dicho miles de veces que odio cuando ella hace esta mierda en público. Todos saben que ella es la puta del vecindario.

"¿Eric, quieres que vaya a tu apartamento esta noche?" preguntó, pasando su mano por mi espalda.

"No, voy al bar esta noche."

"¡Genial! ¡Te veré ahí!" dijo.

Le rodeé mis ojos a mi amigo Brian que estaba del otro lado de la mesa. Él solo encogió sus hombros indefenso.

Luego miré alrededor de la habitación buscándola a ella. No sé lo que me hace esa chica pero esta semana que pasó me ha vuelto loco. Ella es la única mujer que me habla así, y amo que no le tenga miedo a nada. Es una luchadora.

¡Oh mierda, me está mirando!

De repente me sentí avergonzado de que Sarah estuviera en mi regazo. Quiero decir, no es como si estuviera follando a la chica. No me estoy follando a Lucy tampoco.

Desearía poder hacerlo. Esa noche fue suficiente para que siguiera volviendo de por vida.

Ella apartó la mirada, su cara sin emoción. No podía saber si lo estaba haciendo a propósito, o a ella en realidad no le importaba una mierda.

"Oh mira, Cuatro está ahí haciendo movimientos en la primera saltadora." Brian dijo.

Cuando volví a mirar, ella ciertamente estaba hablando con Cuatro, y riéndose. Lucy Monroe ya se había ganado una reputación en Osadía. Para la mayoría era conocida como la increíblemente caliente primera saltadora. Y para otros, solo era llamada la sexy chica nueva. Para mí era la más hermosa criatura en la que he posado mis ojos.

Por supuesto que nunca le diría eso a nadie.

Ni siquiera a ella.