Iron Hide, Silk Heart | Eric Coulter Fan Ficción

#43: Derrota

Otra semana había pasado, y los nacidos en Osadía recuperaron a su antigua líder. Lauren estaba agradecida de que la hubiera cubierto, y juró que me lo debía. Después de un montón de abrazos y sonrisas, me despedí de los iniciados y volví con mis deberes normales de líder. Lo es prácticamente nada. Había vuelto dos veces a Cordialidad, ambas veces pasando el día con Alex. Eventualmente le conté sobre Eric y todo lo que había pasado entre nosotros. Él mostró simpatía, muy para mi desaliento. Odiaba que la gente se sintiera mal por mí.

Pero eventualmente me llamaron a la oficina de Max, así que esperaba que fueran buenas noticias.

"Necesito que vayas al muelle de descarga y ayudes a bajar algunas cajas del camión. Alguien ya debería estar allí pero no terminé de castigarte, así que ve a ayudar."

"Sí señor." Rodeé mis ojos juguetonamente mientras él sonreía.

Cuando llegué al muelle, no vi a nadie descargando el camión además de dos hombres de Cordialidad. Mi corazón se aceleró y esperaba que Alex estuviera allí. Rodeé el camión y lo encontré con una caja en sus manos. Él inmediatamente sonrió cuando me vio.

"¡Ahí está mi chica!" dijo con un tono amigable, colocando la caja en mis brazos estirados.

"Aquí estoy." Me reí, yendo a la repisa y colocando la caja allí.

"Sabes, no te he visto en unos días. Pensé que tal vez te habías olvidado de mí." Dijo.

"Solo he estado ocupada. No tengo mucho tiempo libre por aquí." Mentí.

No era que lo estuviera evitando, solo no sabía si estaba lista para empezar algo que no podría terminar y me sentiría culpable por llevarlo a eso.

"Bueno estaba pensando, tal vez más tarde si no estás ocupada podrías venir conmigo. Tenemos una fogata esta noche."

"Sí, tal vez." Contesté con una sonrisa.

Y justo como un reloj, esa profunda, voz familiar sonó a través de mis oídos. Incluso estando separados, él se las arregla para estar donde quiera que yo me encuentre.

"¿Qué está pasando aquí?"

Suspiré pesadamente, cerrando mis ojos por un momento antes de voltearme a ver a Eric parado ahí con una curiosa pero mortífera mirada en su cara.

"Nada que te incumba." Dije, pero él me ignoró y procedió a mirar a Alex de arriba abajo, que era al menos tres centímetros más bajo que él.

"Soy Eric." Dijo, estirando la mano para sacudirla.

Alex no devolvió el gesto. En cambio, entrecerró sus ojos.

"Eric, he escuchado mucho sobre ti."

"Oh. Espero que buenas cosas." Dijo sarcásticamente, lanzándome una mirada.

Aquí vamos.

"En realidad no, ni una." Alex desafió.

El usualmente alegre hombre parecía transformado por el intimidante saludo de Eric.

"Bueno, eso es una mierda supongo."

"Eric, ¿por qué no solo te vas?" pregunté, irritada.

Él sonrió casualmente a Alex, prácticamente desafiándolo a que hable.

"Lucy, ven conmigo."

"No." Respondí, cruzando mis brazos.

Él miró de Alex a mí.

"¿Por qué no te vas hombre, no ves que ya la has lastimado suficiente?" Alex desafió.

Eric se acercó hacía él, sus ojos oscureciéndose.