control ⊹ cake

prologue

—¿Por qué me tengo que anotar allí? —El moreno señaló al folleto que ocupaba un espacio sobre la mesa de su habitación. Se encontraba fastidiado, no quería anotarse en el club de verano.

—Calum, por favor, ya hablamos de esto. Estás todo el día con tú maldito celular y otras cosas no haces. No es la única excusa para que entres al club, ya lo sabes. —Su padre contestó a su pregunta, ordenando algunas cosas u objetos de la habitación de su hijo.

El adolescente bufó mientras se sentaba sin ganas arriba de la mesa y miraba al papel que tanto le molestaba.

Calum sabía que su padre tenía razón, ya intentó de todas las formas posibles para no poder asistir a ese club. Siguió acomodando sus bolsos ya que iba a pasar tres meses en aquél lugar y luego el comienzo y apertura de la Universidad en el mismo lugar.

Sus padres irían a visitarlo algunas veces en lo que quedaba del verano y a Calum no le importa tanto aquello. Su padre antes de salir se acercó a su hijo y lo abrazó por un medio minuto y desparramó su cabello.

Su pequeño, pero ahora grande niño ya iba a emprender su propio viaje con tan solo 19 años haciendo que este sea algo que nunca olvidará y pueda tomar un propio control en su vida

*   *   *

—¿Club de verano? ¿Esto es en serio? —Murmuró antes de destrozar en pedazos la escasa hoja pálida que su madre había dejado pegada con un imán en la heladera.

Él estaba enfurecido, como ya es costumbre, porque no podían anotarlo en ese lugar sin que él lo supiera, tiene derecho a poder opinar pero parece que no.

Resopló sacando algo de su enojo y subió un poco apresurado a su habitación, se tendió en su cama apoyando sus brazos debajo de su cabeza y cerró los ojos pensando un poco en lo que iba a llevar y ocurrir ahora en más lo que quedaba de sus vacaciones.

No pudo pensar mucho ya que su celular sonó avisándole que lo estaban llamando. Lo tomó con una de sus manos y atendió a Matt, en ese momento se acordó de que esta noche iban a ir a una discoteca.

—¿Cómo anda mi niño preferido? —Bromeó cuando apenas Luke deslizó su dedo en la pantalla dando por inicio la llamada.

—No podré ir esta noche, Matthew. —El ojiazul contestó sin responder a su amigo mientras desparramaba su cabello rubio fastidiado.

—¿Cómo que no? —Se pudo notar un cambio de voz en Matthew haciéndola algo angustiosa.

—Mis padres me anotaron a una mierda de Club Veranil. —Recordó el papel que su madre había dejado.

—¿Esto no es chiste, no? —Quiso saber el adolescente al otro lado de la línea.

—¿Te molestaría con algo así? —Esbozó algo enojado por las palabras de su compañero.

Del otro lado, su colega comenzó a reírse de una forma descontrolada mientras Luke rodó los ojos esperando a que termine con sus carcajadas.

—Esto no te la puedo creer, Luke. —Las risas habían parado un poco del otro lado.

—Ni yo puedo creerlo Matt, lo peor es que ni siquiera me consultó. Llegué y en el refrigerador había un papel explicándome que tengo que empacar ropa para tres meses e ir a una dirección donde supongo que es el Club.

—Seguro la vas a pasar de maravilla Hemmings, capaz conozcas a muchas personas y tal vez a algún chico, quién sabe. —Luego de hablar se formó un silencio que Matthew no tardó en modificar. —Ya tengo que cortar Luke, llámame cuando estés desocupado. —Los pitidos resonaron en el oído del rubio dándole a saber que la llamada había llegado a su fin.

Dejó el celular sobre su cama y se levantó para empezar a buscar ropa y todo lo que le hacía falta para el tal Club al cual iba a asistir lo que quedaba del verano.

Sin su familia apoyándolo, Luke va a comenzar su vida y va a iniciar y poder tomar un control de ella y tal vez, como dijo su camarada, pueda conocer a algún chico en aquél territorio. ¿Pero podrá tomar un control en sus ataques de furia y enojo?

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Historia basada en la canción Control de Halsey