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—Calum. —Ya eran pasada la medianoche y el rubio no podía conciliar el sueño, seguía pensando en lo sucedido unas horas antes y se sentía tan culpable por todo. No tuvo que haber actuado de esa forma y lo sabía, odiaba perder el control por algo tan minúsculo, se odiaba a él mismo por ser así.

–¿Qué quieres Hemmings? —El mayor tampoco podía dormir, intentaba sacar las imágenes del accidente que pasaban por sus cabezas pero era imposible.

—Perdón. —era la septuagésima vez que lo pedía, Cal ya le había dicho que estaba todo bien, pero Luke no lo creía así.

—Ven aquí rubio. —Al escuchar eso, el nombrado se bajó de la cama y miró al moreno que se hacía para un costado dejando un espacio libre.

El menor arqueó una ceja y Calum se rió al verlo, a pesar de que era ya de noche sus rostros se podían contemplar perfectamente.

—No pienses que te voy a violar o algo, todavía sigo intentando entender todo lo pasado. —Habló sintiendo como su compañero se acomodaba en la pequeña cama.

—Perdón. —dijo una vez más viendo como el morocho se daba vuelta quedando sus miradas juntas.

–Escuchame. —Pidió Calum. —No tengo porqué perdonarte ya que no hiciste nada.—Comentó suavemente mirando las facciones del alto. —Sigo shockeado, eso es todo. —Terminó mientras sonreía.

Luego de darse media vuelta otra vez, escuchó como Luke hablaba cosas a murmullo haciendo imposible el  escuche.

Luke nunca había estado así con  alguien; solamente con mujeres, a pesar de que era bisexual las veces que se acostaba con un hombre éste se iba luego de terminar el polvo. Nunca se quedaban a dormir o cosas como esas.

Tampoco alguien lo había entendido con sus problemas de ira, todos le tenían miedo una vez que veían lo era capaz de hacer, Matthew eran el único que lo calmaba pero ahora estaba Calum.

•   •   •

Hemmings se despertó al escuchar golpes en la puerta, no tenía noción del tiempo sólo de que se encontraba durmiendo junto a su compañero pacíficamente y alguien lo había molestado.

Se acercó a la puerta mientras tallaba sus ojos y despeinaba su pelo, al estar a centímetros la abrió y del otro lado se pudo ver a dos señores grandes.

—¿Ésta es la residencia de Luke Hemmings y Calum Hood? —habló el posiblemente más grande entre ellos.

—Sí. —La voz ronca del nombrado resonó en sus oídos.

—Aquí están las materias y los horarios, en una hora tienen que ir hasta la dirección principal, el director los espera. —Luego de que terminaron, se fueron dejándolo al menor con dos papeles y una intriga en su cabeza.

Se dio media vuelta y pudo admirar la esbelta cara del moreno, sonrió de lado y se volvió a acostar con él pasando uno de sus brazos por su cintura.

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Capítulo dedicado a mi niña catamosre 💖

control ⊹ cakeHikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin