Cenicienta, ¿y tu zapato?

Anastasia y la familia improvisada

Así, por los caminos del único mundo del revés, llegamos a un gran castillo, desolado, pero a la vez lleno de belleza. Decidimos ir a explorar.
La puerta estaba abierta, como si nos estuvieran esperando. Nada se sabia, en esta dimensión todo puede pasar.
Subimos por unas grandes escaleras de lo que parecía un salón. Llegamos a un pasillo, gris y triste, con un gran numero de puertas. Jessie abrió una y entro. La seguimos, con la gran sorpresa de que habiamos ido a parar a una gran terraza. Y allí, en medio de todo, había una linda chica morena y con un vestido amarillo que no pasaba desapercibido. Pero lo que realmente no se pasaba por alto era el hermoso y gran oso que descansaba a su lado. "Hermano oso", pensé enseguida. Una voz cristalina llamo la atención de todos.
-Así es mi querida Cenicienta- ¿me había leído la mente acaso?- no te he leído la mente, lo has dicho en voz alta, soy princesa, no un marciano- dijo, y me extraño que ella no hablase al revés, pero no pregunte, ella siguió hablando- muchas leyendas me han contado sobre la chica que perdió su zapato
Me reí. Se creía que era Cenicienta, la original.
-Debo aclararte que yo no soy Cenicienta la original, yo no perdí un zapato- digo y ella ríe
-Pues yo creo que si, y cierto que no eres ella, yo la conocí, acaso no me reconoces, ¿acaso solo reconoces al oso?- dice triste
La miro atentamente, nariz chata, pies grandes y un buen corazón.
-Anastasia...- digo sin creermelo aun.
-La misma- sonrie- supongo que debo ir con vosotros, pero siento que no pueda ser así.
Espera, ¿que ha dicho?
-¿Como?- dice Peyton
-Veréis, yo soy una don nadie, mi madre me crió con el odio a una chica que no hizo nada malo, ella nunca me quiso- senti pena por ella
-No digas eso Anastasia- dice Sam
-Es que es la verdad. ¡Vosotros no lo entendéis!- dice echándose las manos a la cabeza- soy un personaje secundario, mi madre no me valoraba. ¿Sabeis lo que es sentir que tu propia familia no te valora, que no te apoya?- ese discurso nos llego a todos, pero nadie sabia que contestar, a todos nos habian apoyado nuestros padres.
Pero una voz varonil que no e había dejado escuchar mucho sono- yo lo se- dijo adelantándose y sentándose al lado de Anastasia- se que es sentir el vacío de no tener nada ni nadie por lo que luchar, pero con ellos- nos mira a todos- he aprendido que nunca estamos solos, que siempre hay alguna razón por la que luchar, que siempre hay amor donde menos te lo esperas- dice dirigiendo disimuladamente la mirada a Jess, luego se dirige de nuevo a Anastasia- somos una familia unida y que permite el acceso a otras persona, ¿asi que querrías formar parte de esta improvisada familia Anastasia?
Ella sonríe y se tira a los brazos de Harris. Se une a las demás princesas y todas se van. El oso sigue a Anastasia como Rey a Caperucita. Me quedo un rato en la terraza.
Me asomo a la barandilla y miro el mundo del revés.
Una voz me asombra- somos diminutos puntos en el universo- es Secret Shadow- mira lo que tienes delante, casas que parecen estar en un cuadro, todas diminutas, y dentro de una de ellas un niño que piensa que puede cambiar el mundo- me mira- ¿lo podrá cambiar? Dime que piensas Cenicienta
La miro y me giro a volver a ver el paisaje, ella se pone a mi lado, al fin la contesto- nosotros somos los únicos que nos ponemos nuestras metas, y que sea pequeño no quiere decir que no pueda hacer grandes cosas- la vuelvo a mirar y veo un brillo en sus ojos que no había aparecido antes.
-Sabia que ibas a decir eso, Caperucita tenia razón, eres especial- dice sonriente.
Yo niego con la cabeza- soy normal, no soy especial. Solamente veo cosas que los demas no se atreven a ver- ella asiente con la cabeza y por primera vez sonríe.
Luego se va, yo la sigo.
POV'S NARRADOR
Nuestra querida y extraña princesa se fue contenta al saber que su cometido estaba hecho, pues claramente sabia que desde las copas nas altas de aquellos arboles que Cenicienta miraba, se escondía la princesa del hielo.
Y la recompensa a la respuesta de nuestra lectora fue que una llama de esperanza creció en el corazón de nuestra gelida princesa y su odio se disipo de tal forma que decidió presentarse como la siguiente princesa. Desde una copa de los arboles, un componente del ejercito elfico se atrevió a hablarle a la princesa, ya que tenia una suma curiosidad
-Mi señora, ¿es ella de la que hablan todas las leyendas? ¿Acaso ha vuelto?- dijo el elfo mientras ella le miraba. Por un momento el guerrero temió por su vida, dado al mal carácter de su princesa, mas ella estaba de bien humor.
-No, ella no ha vuelto- la decepción del elfo se olía a kilometros- ella no volverá, la que aquí esta es la chica que habla a las leyendas- dijo sonriente, y aunque el elfo no entendió, asintió y se fue, pues opino que ya le había dado demasiada información y no quería hacerla enfadar.