92. Jugando con fuego

3.3K 217 6
                                    

Me encierro con Máximo en el vestidor y no lo dejo salir.

―Carina, déjame pasar.

―¿Qué? ¿Por qué? ¿Me tienes miedo? ¿Algún secreto que ocultar? ―Me muerdo el labio inferior.

Él gira su vista de mis gestos provocativos.

―No oculto nada, apártate.

―Chico malo, ¿no te enseñaron que es de mala educación no mirar a las personas cuando te están hablando?

―No molestes y déjame salir.

Lo abrazo.

―¿Qué pasa? ¿Ahora qué estás comprometido no tienes ni derecho a mirar?

Vuelve la vista hacia mí.

―¿Qué buscas? No tengo nada para decirte.

―Ah, pero yo tengo muchas, empezando por, ¿qué querías preguntarme antes de que la rara de Karen nos interrumpiera?

―No quería preguntar nada. ―Frunce el ceño.

―Pues... yo tengo una teoría, querías saber por qué la ropita del bebé era azul, ¿verdad?

―No... ―Gira la vista sonrojado―. Eso díselo al padre de tu hijo.

―Pero si no sé quién es. ―Sonrío.

―Pues yo no soy, así que suéltame. ―Me aparta y me pongo adelante de la puerta para que no pueda avanzar―. Carina... ―Frunce el ceño―. Déjame pasar.

―No ―digo cortante―. Dime y te dejo salir.

Sonríe y pone las manos sobre la puerta, entre ambos costados de mi cabeza.

―Estás jugando con fuego y te vas a quemar.

―Huy, qué miedo, vamos a jugar ―lo desafío.

Voy a jugar con fuego y voy a ganar.

Estoy embarazada ¡¿De quién?! #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora