I'LL NEVER LET YOU GO (PEETA & KATNISS)

27. Tranquilidad

CAPÍTULO 27: TRANQUILIDAD

POV KATNISS

"Regálame tu risa,
enséñame a soñar
con solo una caricia
me pierdo en este mar.

Regálame tu estrella,
la que ilumina esta noche,
llena de paz y de armonía,
y te entregaré mi vida.

Haces que mi cielo
vuelva a tener ese azul,
pintas de colores
mis mañanas solo tú
navego entre las olas de tu voz
y tú, y tú, y tú, y solamente tú
haces que mi alma se despierte con tu luz
tú, y tú, y tú...

Enseña tus heridas y así la curará
que sepa el mundo entero
que tu voz guarda un secreto
no menciones tu nombre que en el firmamento
se mueren de celos
tus ojos son destellos
tu garganta es un misterio

Haces que mi cielo
vuelva a tener ese azul,
pintas de colores
mis mañanas solo tú
navego entre las olas de tu voz
y tú, y tú, y tú, y solamente tú
haces que mi alma se despierte con tu luz
tú, y tú, y tú..
y tú, y tú, y tú, y solamente tú
haces que mi alma se despierte con tu luz
tú, y tú, y tú...

No menciones tu nombre que en el firmamento
se mueren de celos
tus ojos son destellos
tu garganta es un misterio

Haces que mi cielo
vuelva a tener ese azul,
pintas de colores
mis mañanas solo tú
navego entre las olas de tu voz
y tú, y tú, y tú, y solamente tú
haces que mi alma se despierte con tu luz
y tú, y tú, y tú...

y tú, y tú, y tú, y solamente tú
haces que mi alma se despierte con tu luz
y tú, y tú, y tú..."

"Solamente tú"

PABLO ALBORÁN

Nuestro piso correspondía a la planta Doce y era inmenso, colorido y elegantemente decorado. Haymitch y Effie nos guiaron hasta nuestras respectivas habitaciones. La mía era más grande que cualquier casa de La Veta. Effie me indicó donde estaba la ropa interior, la de cama y la de uso diario. Estaba detrás de una puerta a un costado de la habitación, Effie dijo que servía de vestidor, para cuando nuestros equipos nos prepararan, dentro del mismo habían varios armarios, donde las cosas estaban guardadas pulcra y categóricamente y podías elegir la ropa de tu preferencia programándola por medio de un aparato electrónico con una pantalla táctil.

Después, se despidió de mí, diciéndome que si quería podía descansar y relajarme, hasta la cena. Lo más seguro era que no pudiera hacer ninguna de las dos cosas. Programé el armario como me indicó Effie, para encontrar algo más cómodo para ponerme. Un pantalón largo de tela liviana y suave y una camiseta de mangas cortas de seda, también busque ropa interior, para luego abandonar el vestidor y dejar todo sobre la cama.

Me sentía incomoda con ese traje tan ajustado e incluso con el maquillaje. Tuve la urgencia de borrar cualquier rastro del Desfile, de los Juegos. Cuando fui al baño me tomó al menos veinte minutos, aprender el funcionamiento de la bañera, tenía demasiados botones y demasiadas opciones. Me pareció tan innecesario ¿Qué tenía el Capitolio en la cabeza? ¿De verdad necesitaban todo eso? Elegí la opción simple, sólo agua y espuma, Esperé a que la bañera se llenara, mientras me quité el maquillaje de la cara, me desvestí y entré en la bañera, dejando la toalla lo suficientemente cerca para que pudiera agarrarla rápidamente, sin tener que moverme demasiado. Me tiré hacia atrás, apoyé la espalda en una de la puntas y me relajé. Tomé una esponja y me froté con ella. Tuve algunos problemas para apagarla, porque active varias funciones a la vez. Uno que me lanzó un líquido con aroma a rosas, algo que parecía tener una función masajeadora, y más espuma. Intenté controlar mis nervios y sin saber cómo lo paré. Decidí lavarme el cabello por separado, para no hacer más desastres. Había una secadora de cuerpo que se activo en cuanto toque el suelo.