Perderte de Nuevo

CAPITULO NUEVE

CAPITULO NUEVE

−Olivia se despertó cuando algunos rayos del sol se colaban por la ventana, abrió los ojos y sonrió al ver los brazos de Paúl rodeando su cuerpo suspiro, y se sintió feliz se giró con cuidado dejo un beso dulce en los labios de Paúl y se levantó tratando de que él no se despertará−

Olivia – buenos días –entró a la cocina recién bañada, con un pantalón de mezclilla y una blusa de botones al frente y manga tres cuarto−

Raquel – buenos días –Olivia se aceró a ella y la saludó con un beso en la mejilla−

Olivia – pasé al cuarto de Paulette y seguía dormida –Raquel sonrió al escuchar a Olivia decir eso−

Estrella – no es necesario que finjas, aquí no está Paúl –Raquel miro a Estrella molesta−

Olivia – no estoy fingiendo, realmente me preocupa Paulette y siento que tengas tan mala imagen de mí –Estrella la miro enojada−

Estrella – no es que tenga una mala impresión, es que te conozco y se la clase de –Raquel se acercó a Estrella−

Raquel – suficiente, no quiero que sigan discutiendo

Estrella – no puedo creer que la defiendas si al menos hace unos días pensabas igual que yo acerca de esta mujer –Estrella miro a Olivia− ¿ahora porque cambiaste?

Raquel – porque las personas tenemos derecho de rectificar y Farah ha cambiado, Paúl está feliz a su lado, hasta Paulette se ha dado cuenta no puedo creer que tú no

Estrella – yo la conozco y muy bien, sé lo –Raquel la interrumpió nuevamente molesta−

Raquel – basta Estrella no voy a permitir que en mi casa se falten al respeto

Olivia – siento mucho que tengas esa imagen de mí, pero espero que cuando me conozcas la puedas cambiar –Estrella miro a Olivia molesta−

Estrella – se me quito el hambre –se levantó del comedor molesta−

Raquel − ¿A dónde vas?

Estrella – a la tequilera, habemos personas que si tenemos que trabajar –miro a Olivia molesta y salió a toda prisa de la casa−

Olivia – siento haberles arruinado el desayuno –Raquel tomó la mano de Olivia−

Raquel – no te preocupes Farah, me encanta que hayas cambiado tanto y de verdad creo que eres la mujer indicada para mi nieto –Olivia la observó tratando de sonreír, pero realmente no podía, no era justo que las engañara de esa manera− ¿Qué pasa? Acaso dije algo malo

Olivia – no es sólo que –guardo silencio−

Raquel – Farah sabes que puedes confiar en mí –le guiño un ojo− lo que sea te entenderé

Olivia – Gracias doña Raquel –Olivia se puso a su altura− ¿puedo? –Raquel asintió y la abrazo−

Raquel – ahora acompáñame a desayunar no me gusta desayunar sola –Olivia asintió y Gilda colocó el servicio en la mesa−

−Dante apagó la alarma del celular y miro a Farah encantado, no podía creer que esa mujer estuviera ahí a su lado, se acercó a ella y le dio un dulce beso en los labios, Farah sonrió y abrió los ojos−

Farah – buenos días –Dante delineo con sutileza su rostro−

Dante – buenos días hermosa –se acercó nuevamente a ella y dio un beso dulce en su nariz− ¿Qué quieres hacer hoy?