CAPÍTULO TREINTA Y CINCO

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CAPÍTULO TREINTA Y CINCO


–Olivia lo había dicho una sensación de miedo invadió su cuerpo y no era miedo a perder la comodidad que estaba viviendo, era miedo a perder a Paul a no poder ver más a Paulette e incluso que Estrella se alejará de ella, para suerte de Olivia Raquel juntó con Eloísa iban entrando y escucharon toda la conversación, Raquel se dio cuenta del miedo de Olivia y tenía que ayudarla, Aidé algo sabía pero tenía que investigar cómo era que lo sabía porque eso quiere decir que a lo mejor Antonio e incluso Leonor podrían estar enterados–

Raquel – claro que no eres la misma Farah –Olivia la miró sintiendo alivio al escucharla– ahora eres diferente y es gracias al amor de Paul –se acercó a ellos–

Aidé – no pero ella dijo que no era Farah –expresó molesta al escuchar como Raquel intervino para que Olivia dijera la verdad–

Eloísa – de seguro escuchaste mal –se acercó a ellos Paul observó a Olivia– Farah la mamá de Mía quería despedirse

Raquel – ve mi amor –tomó las manos de Farah y estaban heladas–

Aidé – no se debería de ir hasta que nos explique porque dijo que ella no es Farah –Olivia observó a Paul, lo veía serio creía que hasta molesto–

Paul – ella no te tiene porque dar ninguna explicación –Aidé frunció el ceño molesta– vamos tomó la mano de Olivia– te acompaño para despedirnos de los padres de las amiguitas de Paulette

Olivia – sí –lo observó y Paul le dio una pequeña sonrisa–

Raquel – creo que ahora si deberías irte –Paul y Olivia ya habían salido, Raquel miraba a Aidé molesta no podía creer lo que la envidia era capaz de hacer en las personas–

Aidé – me estás corriendo de tú casa –expresó sorprendida– por dios Raquel yo lo único que quiero es que Paul se dé cuenta de la clase de mujer que es "Farah" –lo último lo dijo con más énfasis haciendo con sus dedos unas comillas–

Raquel – lo que tú estás haciendo es querer que mi nieto se aleje de esa mujer, porque el te gusta y piensas que si ellos dos se separan el ira corriendo a tus brazos

Aidé – no puedo creer que me estés hablando así, por dios Raquel nosotros nos conocemos de hace años, incluso yo fui amiga de Vanessa

Raquel – y por eso mismo sé lo que sientes por mi nieto, pero entiende algo Aidé, mi nieto sólo te ve como una hermana de la misma manera que ve a Estrella de esa manera te ve a ti y tanto es así que a pesar de todo el apoyo que le diste cuando la muerte de Vanessa el prefirió fijarse en Farah antes que en ti –Aidé no podía creer las palabras de Raquel, sintió impotencia coraje, le encantaría gritarle que esa mujer no era Farah, pero se contuvo quería buscar un momento más indicado y claro que lo encontraría–

Aidé – nunca pensé que me dijeras eso, ojala y nunca te decepciones de esa que está al lado de tu nieto –giro y salió furiosa de la cocina–

Eloísa – hay no pobre de mi amiga con esa arpía –Raquel observó a Eloísa– yo voy a buscar a mi abuela –salió de la cocina de prisa, casi ponía a Olivia de nuevo en problemas–



–Estrella preparó una sorpresa para Julián iba a aprovechar el movimiento en la hacienda para que nadie pero sobre todo el no sospechará–

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