Extras y especiales (saga Evil)

Cumpleaños de Hex.

09/07/2017

Helena.

Riendo a carcajadas al ver a su esposo más nervioso que nunca, lo sabía porque conocía muy bien a Hex como para identificar cuando estaba alegre, nervioso, enojado, confundido, celoso o tramaba algo. Y en esos momentos su marido estaba muy nervioso, varios demonios Fénix estaban más que feliz de darle regalos a su rey en su cumpleaños.

Hex queria correr, se le notaba en la cara más que cuando alanna le decía de tener novio a sus quince años, Hex se la pasa todo ese dia ideando un plan para asustar a los futuros pretendientes de la hija que tenían, ella no hacía tanto escándalo por que entendía a su hija pero para ella su tormento era Abdel, ese mocoso malcriado por Hex le hacía tener canas a sus doscientos tres años y ni decir que sufría Hex, tenía que remediar las travesuras de Abdel cuando hacía algo que molestaba a otros demonios.

- Abre la caja - dijo, al ver el rostro de su esposo con dudas- no creo que se algo malo... eres un demonio nada debe sorprenderte...

Bien, debería no decir este tipo de cosas antes de ver lo que contenía una caja, Hex abrió la caja sin pizca de estar nervioso ¿Qué podía ser peor que una serpiente lagarto venenosa? Nada, la serpiente había picado a su marido causándole estar más de media hora paralizado mientras la sangre de fenix hacia su trabajo en curarle, la serpiente había sido regalo de unos luxen para hex por su cumpleaños.

- Ten el teléfono a mano.

- ¿Para que?

- Por si es otra demonio venenoso como mascota.

- Esta bien. -rio, le mostró el móvil que tenía en la mano derecha- anda abre asi ya salimos de duda y estrés.

Lo vio asentir y quitar el moño de regalo, algo dentro de la caja de movió y Hex brinco lejos del escritorio mirando la caja con terror, hasta ella también había brinco y casi corrido lejos como una gallina. Su marido trago y volvió acercarse, alzó la tapa de la caja negra con dibujos de calavera con mucho cuidado por si era un animal venenoso.

Agarró una estatua de mármol que estaba en una esquina del escritorio lista para defender a Hex por si algo salía disparado de esa caja tenebrosa.

- El próximo año hagamos una lista de regalos de cumpleaños -dijo Hex mirandola- así nos evitamos de accidentes mortales contra el rey.

- Estoy de acuerdo, aveces no entiendo a los demonios...

- Somos dos, y eso que soy uno de ellos.  

Hex siguió alzando la tapa de la caja esperando que algo se alzará contra él, ella no podía ver que había en la caja hasta que algo brinco echando fuego a diestra y siniestra, soltó la estatuilla y grito. ¡Mierda Santa! Un bebé dragón volaba en el estudio lanzando fuego y haciendo caos.

- Bien, denle regalos destructores al rey -gruño Hex mirando al dragón- ¿me quieren ver muerto?

- No cariño, eres el mejor -intento tranquilizarlo- ahora atrapemos a esa cosa antes de que acabe con lo que queda de tu despachó.

Fue un problema atrapar al bebé dragón, Hex no podía inducirlo a hacer caso por quetodavía no había un vínculo de sangre, el bebé dragón intento arrancarle un par de dedos a Hex, ella intento atrapado al lanzarle una almohada pero no funcionó esa lagartija destrozó todo el cojin, les lanzó fuego a los dos, acabo con el cabello chamuscado y Hex rasguñado en toda la cara, pero lograron someter al bebé dragón. Metieron a la lagartija roja esa a una jaula y un Molstan se lo llevaba al cuidador de los dragones de la familia.

— Creí que no vería un mañana... –suspiro ella sentada de espalda a Hex– Tendré que ir con Lea para que me haga un conjuro para el cabello.