25 diciembre

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Especial de cumpleaños.
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Kai.

- ¿¡Porque No!? -protesto ella, cruzandose de brazos-

Observó como Klaus hacia una mueca, parecía fastidiado y malhumorado.

- No me gustan las fiestas.

Ahora ella suspiro, ¿Quién no adoraba las fiestas? Por más sencillas que fueran... frustrada se pasaba la mano por el cabello, mientras las gemelas gateaban en el corral que había mandado hacer para ellas y así pudieran moverse y jugar con sus juguetes en un área fuera de peligro. Camino hacia a su esposo y tomó asiento en el posabrazos del sillón, lo abrazó para bajarle el mal humor.

- Es una reunión entre familia... hay que festejar tu cumpleaños, Klaus. -Queria festejarlo, en todo los años que estuvo viviendo como esclava jamás había visto que festejar esa fecha y ella quería hacerlo ahora- ¿Qué tan malo puede ser? Va a estar tu hijo con su familia, Aiden....

Bueno... no estaba muy segura que Aiden fuera a venir con eso de su ascenso complicaba las cosas. Aiden siempre llegaba con regalos y pastel para Klaus que se portaba frío pero ella sabia que a su esposo le gustaba las estupideces de Aiden, y que a pesar de todo Klaus seguía cuidando de su hermano.

- Podemos hacer que venga... vamos.... -Insistia, el mar humor de klaus no mejoraba con eso- ¿solo una pequeña y sencilla reunión? ¿va?

- Haz lo que quieras.

Chillo y le beso, salió corriendo hacia la cocina para darle indicaciones Fauna para que hiciera la comida preferida de Klaus y de los demás, busco a Dill para que limpiar la sala de relax del Castillo para la reunión, iba hacer que su esposo dejará de darle poca importancia a su cumpleaños, esta fecha era importante para ella y para todos.

Estaba dando vueltas en los pasillos y se detuvo al ver a un grupo de demonios reunidos en el patio, ¿Estaba pasando algo? Salió del Castillo y fue al patio, esperaba que no fuera una de esas peleas que hacían, los demonios eran peores que los políticos humanos en la camara de diputados cuando se agarraban a golpes... y lo decía en serio.

El grupo de demonios estaba con un pequeño dragón que causaba travesuras, le querían poner una correa. ¿para que? Siguió observando y escuchando ya que nadie se dio cuenta de que ella se encontraba a ahí.

- ¿Será que al amo le gustará? -preguntaba un Draker-

- Por su puesto, el siempre a querido un dragón de piel dorada. -Decía un Molstan- vamos a bañarlo y llevarlo a su despecho.

Varios demonios asentían, les vio organizarse para controlar al pequeño dragón que parecía más interesando en comer que en los demonios. No puedo evitar soltar una pequeña risa, así que algunos demonios se unían para darle regalos a Klaus... ¡eso era fantástico!

***

Dix.

- Sigo pensando que debemos regalarle unos pases a sang et horreur. -Tango le pasaba los boletos de uno de los mejores club del infierno- al amo le gustará.

- No. -Guardo los boletos en su pecho derecho- tenemos que darle algo único...

Siguió caminando, el mercado era tan extenso que parecía interminable. Quizás una mini fiesta privada... ¡siii! Tomo a Tango de la mano y corrió hacia el area de comida y comprar la comida preferida de Klaus para después comprar los ingredientes para un pastel, comprarían también chucherías de fiesta. Eso le sacaría una risa Klaus.

- ¡Dix! -protestaba Tango- ¡odio correr!

Ignoró sus protestas, compraron todo lo necesario y se fueron a la casa de Tango para hacer las cosas, estando ahí los dos se dieron cuanta de algo.

- No se cocinar. -Tango miraba las cosas como si hubiera visto un fanstama- tu tampoco.

!Claro que si!

- ¡Por supuesto que se cocinar! -golpeó la mesa, observó todo los ingredientes algo nerviosa- pero nunca he hecho un pastel...

- Vaya... eso es un alivio. -Ironizó Tango- me alegra no tenerte de esposa, me moriría de hambre.

Enojada le golpeo, ¡le iba a demostrar que con ella no se moriría de hambre! Empezaron a seguir una receta y mientras hacían todo, ella provocaba roces con Tango que parecía no darse cuenta. !Era un burdo! -gruño enajoda- habia intentado muchas cosas y el idiota parecía no darse cuenta de las intenciones de ella. ¿Qué más podía hacer?

Terminaron todo, ella se adelantó con las cosas mientras que el idiota de Tango se iba hacer uno pendientes. Se escabullo hasta el despacho de klausny aprovecho que estaba lejos para poner todo, puso las serpertinaz para que cuando Klaus tomará asiento estas explotaron sobre él. Wuau... era una genia.

- Listo. -Tango le tocaba e hombro, el corazón le latia apresuradamente.- vamos a escondernos, ahí viene el amo.

Tomaron su forma de gato para esconderse bajo el sillón, observaron como Klaus tomaba asiento en su silla detrás del escritorio y miraba el pastel de ello algo curioso.
Ella y Tango se miraron, después  salían corriendo como locos por debajo del sillón hacia Klaus que justamente arqueaba una cena, se impulsaron y brindaron hacia el cuello de Klaus que los agarró en el aire impidiendo que le atacaran el cuello. Maullo frustrada, Tango movia sus patas para tocar la cara de Klaus.

- ¿Qué creen que están haciendo?

Maullo frustrada, Tango seguí insistiendo en poner su pata en la cara de Klaus al ver que no podía colocaba una en el pastel y mordia a Klaus para que lo soltara, los dos fueron soltados, Tango se lanzaba hacia Klaus embarrandole pastel en la cara con las patas. Ella hizo lo mismo, embarraron a Klaus de pastel.
Ella tomó su forma media humana, se lamia el merengue de los dedos... sabía fu
Feo. 

-Esto es lo peor que probado. -Klaus hacía mueca al probar el merengue-

- Lo se, Dix lo hizo. -Tango se limpiaba- Tango no cocinar cosas  venenosas.

Lo fulmino con la mirada, ¡bastardo insensible! 

- Nunca cocino... -Se sonrojaba- se hacer Tango a la plancha, Tango al relleno, Tango en filetes...

Tango la miraba mal y ella le sonreía.

- Si me besas no te haré en comida. -Le guiño-

- Prefiero aguantar el mal humor de Klaus.

Klaus alzaba una ceja a Tango. Así como diciendo "¿Seguro?"
Ella corrió y busco una serpentina, la explotó en la cara de Klaus.

- Feliz once mil quinientos cincuenta y tres años... -Chillo emocionada-

- Tango ver una cana en el amo... 

Klaus los fulminaba con la mirada, ya estaba acostumbrada, eso era de todo los años que ellos hacían esto para él.

- Abre el regalo de Tango y mío.

Le jalaron la caja para que la abriera. Les había costado conseguir un cuerno de un Fhauno. El cueron tenía magia que podía ser utilizada de muchas formas y ellos habían hecho una imagen de Klaus con su familia en movimiento, todo los Markov junto sin olvidarse de ellos dos, ella estaba acostada a lado de Klaus y Tango jugando con Abdel.

- ¡Feliz cumpleaños, ¡Amo! Todos estamos bien guapos!

- Feliz cumpleaños, amargado. -decia ella-

- Son un desastre ustedes dos.

Una forma de decir gracias y ellos dos lo sabían. Ella y Tango embarraron a Klaus de merengue... era divertido hacer esto cada año. Y la puerta se abria....
Oh....
La esposa del amo entraba, Kai se quedaba atónita al verlos, no era normal ver a dos gatos embarrarle la cara a un demonio de alto nivel ¿o si? No... maullo y miró a Kai como un angelito bueno, Tango seguí embarrando el brazo de Klaus, parecía estar privado en hacerle una imagen con el  merengue.

- ¿Interrumpo?

Klaus los soltaba y negaba, ella se sentó y miraba a Kai feliz.

- No, estos dos ya se iban.

¡Claro que No!

•••••
CONTINUAR....

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