Capítulo 4._

2.9K 155 14
                                    

Llevé mis manos a mi pecho y me pregunté a mi misma, ¿Por qué duele? una horrible presión estaba alojada allí y.. tenía alrededor de horas intacta. Lo que había pasado con Sophie me dejó completamente en shock.

¿Cómo podía dibujar? sin siquiera conocerlo. O sea, la cara solamente eran rayas negras, todo era absolutamente negro. Y no podía decir si me molestaba por el dibujo del desconocido, o.. sentía tristeza por el dibujo de Luke.

Un gruñido proveniente del cielo, me alertó a que a media noche Sophie se iba a despertar y yo tenía que estar con ella, ella odiaba las tormentas y pues, yo no era muy amantes a éstas tampoco.

Los rayos no se hicieron de esperar, y mi miedo creció. Derek se removió en la cama, pero no dió indicios de que estaba despierto, aparté la manta que cubría mi cuerpo y caminé hacia el cuarto de Sophie.

Sophie estaba acostada en su cuna color rosa, apretaba con fuerza un oso que Zachary le había comprado meses atrás. Al percatarse de mi presencia, aflojó su agarre y abrió los brazos.

Invitandome a que la sujetara y que permaneciera con ella.

Y esa era la única invitación que nunca rechazaría.

La tomé en mis brazos y la mecí, logrando que sus manos temblorosas pararán. Un rayo hizo que diera un respingo, mecí con más fuerza Sophie, cuya manito me apretaba con fuerza el brazo.

  -Mami.- dijo con una voz dulce y a la vez llena de terror.

  -Shh, dormirás conmigo.- murmuré.

Tomé en mi mano el enorme peluche y lo agarré con fuerza, al girarme.. había olvidado encender la luz, puesto que la luz de la luna era lo único que estaba.

Un segundo rayo cayó cerca, la luz del rayo anterior virtió el cuerpo de un Derek con la vista fija a un punto desconocido. Su actitud era extraña y me asustaba. Lo miré un par de segundos. Su mirada estaba perdida, ni siquiera había escuchado sus pasos.

  -¿Derek?.

Hizo caso omiso a mi llamado, de pronto sacudió la cabeza, como si se hubiese quedado en pleno estado vegetal durante unos infinitos segundos, lo miré perpleja. ¿Qué pasaba con el? me fijé en sus mano, temblaban. Dejé salir un suspiro y observé como él, pasaba dos dedos por su sien.

  -¡Por Dios!.- suspiré.- Me has asustado.

Derek fijó sus ojos en mi, luego en Sophie. Tragué con dificultad.

  -¿Por-por qué no estas durmiendo?.-pregunté al ver que el estaba inmóvil.

  -No te ví en la cama y me preocupé, tengo que viajar temprano..

Murmuró, fruncí el ceño. No era raro que el viajara, pero.. No sé, simplemente me preocupaba.

  -¿Te vas?

Asintió.

  -¿A donde?

  -Estados Unidos, tengo que realizar unos negocios.-me mordí el labio con fuerza, y apreté a Sophie a mi. Estaba dormida en mis brazos.-¿Quieres irte conmigo?

Negué con la cabeza.

  -No, tengo trabajo.

  -Puedes dejar ese trabajo, sabes que tengo suficiente dinero para mantenerte a ti y a Sophie.

  -No me gusta ser carga de nada, Derek.

  -No serías una carga, -___________. Lo haría con mucho gusto.-me negué, se sentiría extraño ser una mantenída, o sea, Derek era solamente mi novio, no tenía porque mantenerme no nada por el estilo.

Enamorada de su acosador |Luke Hemmings| EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora