Cap. 65 ¡Abre la puerta, Déjame entrar!

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Autora: Chai Jidan

Traductor a inglés: Trangcugia

Editor en inglés: Editor: @anhnguyen12332

Traductora al español: Karina

Correctora: Jossy Rdz

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El domingo por la tarde, Yuan Zong se reunió con un viejo camarada.

El hombre era de la misma edad como Yuan Zong, fue dado de alta del ejército dos años más tarde que él, pero ya tiene un hijo de cuatro años de edad. Ambos solían estar al frente de su división, sin embargo, han transcurrido cinco años y estos dos hombres en la actualidad tienen marcados contrastes en sus apariencias y agilidad mental. Durante los últimos años, Yuan Zong ha perseverado por sí mismo mediante el ejercicio, se dedicó a la carrera de un guardaespaldas. Por lo tanto, sus músculos se mantuvieron tan audaces como el acero, un hombre bien tonificado, como una poderosa estatura que no difiere mucho de los viejos tiempos. Por el contrario, su compañero pronto había establecido una familia y se había vuelto más rechoncho, recuperando la apariencia externa de un hombre típico en sus treinta años.

Dos viejos compañeros compartieron un momento de asombro, ya que se reunieron de nuevo después de un largo tiempo.

Los hombres empezaron su conversación, "He visto todas tus entrevistas. Francamente, tengo que decir que te admiro tanto, honestamente no poseo tanta asertividad. Después de dejar el ejército, regresé a mi patria y trabajé para un servicio de trenes, sólo para volver a casa una vez cada dos semanas".

Los dos sonaron sus copas entonces Yuan Zong tomó un gran sorbo, sintiendo calor en el estómago.

"¿Oh, pero todavía estás soltero?", preguntó su amigo.

Yuan Zong asintió con la cabeza.

El amigo de Yuan Zong mostró un poco de sospecha, "Cuando estabas en el ejército, literalmente había una compañía de mujeres soldados que estaban enamoradas de ti. Durante esos tiempos de duro entrenamiento, ser ignorante de estos asuntos parecía al menos razonable. ¿Pero ahora has llegado a ser exitoso, las mujeres deben estar amontonándose a su alrededor, y todavía no has caído por ninguna?"

"Hay uno", respondió Yuan Zong, "Pero esa persona no está contento conmigo."

"Considerando su identidad y condición en este momento, ¿Podría haber alguien que no esté satisfecho?"

"La cosa aquí es que la identidad de esa persona es aún más prestigiosa que la mía, y no me hagas empezar con su condición." Yuan Zong se quejó consigo mismo, tomando otro sorbo.

El compañero se puso curioso, "¿Esta persona pertenece a su empresa?"

"Se puede ver un poco como un aprendiz."

"¡Yo lo sabía!" el otro hombre guiñaba el ojo, "¡La última vez cuando vi ese video mostrando las mujeres guardaespaldas en tu empresa, pensé que todas eran muy hermosas! ¿Qué tal es la que te gusta?"

Pensando en Xia Yao, un rayo de ternura se reflejo en lo profundo de los ojos helados de Yuan Zong.

"Esta persona... puede aprender todo en un abrir y cerrar de ojos, puede reaccionar más rápido que nadie, es famoso en la oficina como un personaje loable [1], excepcional en las investigaciones. A primera vista, esta persona puede parecer particularmente astuta, pero de hecho nunca tiene una pizca de intención astuta. Sólo es un niño tonto."

[1] Loable: que merece elogio o alabanza.

Una mirada de admiración iluminó la cara del compañero, "¿Alguna vez has escuchado esta afirmación? La perfección es uno con el CI (coefiente intelectual), pero sin CE(coeficiente emocional)!"

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