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Capítulo ochenta y ocho «demanda»

 «♪»

Entraron corriendo al despacho del abogado que estaba con ropa casual; una simple camiseta azul pálido junto con unos jeans azul marino, frente a él estaba JungKook que también tenía ropa casual, sus hombros eran cubiertos por una chaqueta negra, debajo traía una playera blanca, unos pantalones negros enfundando sus muslos y un par de botas militares negras. YoonGi jadeó sin comprender qué ocurría, se acercó con pánico al escritorio, SeokJin lo seguía detrás, muy de cerca.

— ¡¿Qué pasó?! —Casi grita el pálido.

— Recibí una llamada ayer en la noche y-...

Un ruido en el baño —característico del agua corriendo— resonó por la habitación haciendo que todos miraran hacia la puerta que se abrió de manera lenta.

Allí apareció con una sudadera demasiado grande para su cuerpo, un par de pantalones viejos, y un par de tenis negros. YoonGi se enderezó asustado.

— ¿JiMin?

La garganta de todos se secó y sus ojos se abrieron, estaba allí, delgado, con las mejillas un poco marchitas pero los ojos vivos, su cabello estaba más largo y sus uñas parecían más cortas de lo que usualmente eran. Parecieron procesarlo, dudar un poco sobre la existencia del presente.

El joven sonrió tenuemente, no fue una sonrisa real, sino una extraña al no saber cómo responder por ser preso de una oleada de sentimientos que acorralaba su pecho, caminó lentamente hasta correr y poder abrazar al pálido que seguía estático, al estar en contacto, al estar juntos, al sentirlo firme oliendo su característico perfume no pudo más, entre los brazos del mayor comenzó a deshacerse en lágrimas. Los demás rápidamente se acercaron, TaeHyung abrazó con fuerza a JiMin por atrás, SeokJin tenía el corazón en la garganta, miró a JungKook y luego al abogado.

— Cuando recibí una llamada del centro pensé que era el joven Jeon. —Habló el abogado terminando la frase— pero resultó ser el joven JiMin...

— ¿Habló? —SeokJin miró a su joven hermano que estaba recibiendo demasiados mimos por todos los presentes. HoSeok acariciaba su nuca, TaeHyung peinaba su lago fleco, NamJoon apresaba sus mejillas y YoonGi simplemente no lo soltaba.

— Ah... —JungKook interrumpió— JiMin me pidió el número.

— ¿Qué? ¿Por qué haría eso?

— JiMin no estaba al tanto del proceso legal que ustedes estaban llevando a cabo. Recientemente estudió un poco de educación cívica y ética, allí fue metiéndose en los derechos y obligaciones, poco a poco fue estudiando lo que más le interesaba. Me preguntaba algunas cosas, como qué diagnóstico tenía para que lo metieran... —soltó una risa— no lo dijo exactamente así pero esa fue la esencia de la pregunta... le mostré el diagnóstico y me pidió, me preguntó, si podía explicarle cada una de las cosas allí puestas. He aprendido un poco de la mente de JiMin, exactamente cómo analiza, así que supuse que haría una relación entre el diagnóstico que le dieron y lo que él realmente es. —Afirmó— ayer en la mañana me preguntó si él podía efectuar una demanda por negligencia médica y abuso. —Soltó una risa incrédula— esas, literalmente, fueron sus palabras. Estaba sorprendido pero no le mentí, claramente podía hacerlo. —Suspiró— así que me pidió el número y bueno... estamos aquí.

— Eso... eso puedo entenderlo... —negó— no del todo, pero... sólo... ¿Por qué? ¿Cómo es que él puede estar afuera?

— Como ya te dijeron. —Respondió el abogado— JiMin es quien ha efectuado la demanda...