Capítulo 47 | Intruso Planeado.

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Anna's Pov:

Hace unos días Nora me invitó a su departamento, le he preguntado varias veces de que se trata todo esto ya que me dijo que era algo muy importante y que no podía faltar, solo me dijo que tenía que ir elegante y preparada mentalmente para lo que sea.

Sí, lo sé, ¿Más dramática? Imposible pero así es ella y la quiero más que nadie en el mundo.

El punto es que he estado muy distraída por esto, ya que se supone que es mi mejor amiga y nos contamos absolutamente todo, entonces, no entiendo cuál es su misterio. La razón por la que no estoy muy segura de ir es porque van a estar Chase y Alex, la verdad es que no estoy de ánimos como para soportarlos, especialmente a Alex, por obvias razones.

Después de pensarlo un poco decidí ir, ya que no puedo defraudarla y moriría de la íntegra si no voy. Por eso me encuentro observando mi armario de pies a cabeza, tratando de encontrar algo que ponerme, ella dijo, ponte algo elegante pero tampoco tan elegante, es decir, casual pero tampoco tan casual ¿Entiendes? La verdad, lo entendí porque me ha dicho lo mismo en varias ocasiones y ya sé a qué se referir con eso.

Al final elegí una short beige con líneas blancas de talle alto con un lazo del mismo estampado en la cintura junto a un crop top blanco sin tiros.

Al final elegí una short beige con líneas blancas de talle alto con un lazo del mismo estampado en la cintura junto a un crop top blanco sin tiros

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Luego de decidir mi outfit, me fui a duchar. Al salir me vestí y me maquillé con algo sencillo pero que se notara un poco. Esperé a que Travis me avisará que estaba afuera para ir al apartamento de Nora.

Se preguntarán, ¿Quién demonios es Travis? Para explicarles necesito recapitular un poco.

Flashback:

—Voy a tomar tu consejo, Sr. Sonriente —contesté con sarcasmo—. Quiero que sepas una cosa, Alexander. Esto que hiciste no se queda así, puede que esta vez hayas conseguido salir de este problema pero créeme que no voy a dejar que sigas haciendo de tu vida como si yo no formara parte de ella, tú me metiste en tu vida el día que me pediste que nos casáramos. Por si no recuerdas, la noche que nos volvimos a ver fuiste tú el que propuso que hagamos lo que nuestros padres querían y hace 4 días volviste a pedirme que sigamos con esto, ya es hora de que vayas asumiendo las cosas ya que si hoy estamos así es porque ambos lo permitimos ¿Ok? —recordé con los brazos cruzados y el ceño fruncido, luego me di la vuelta dispuesta a irme pero me detuve cuando tomé el pomo de la puerta—. ¡Ah! Otra cosa, si tú andas acostándote y viéndote con mujeres, no quiero que después vengas a reclamarme cuando esté con alguien —advertí estando de espaldas y me fui sin decir ni una sola palabra más.

Me harté de que siempre quede como la cornuda de la relación, me harté de que siempre me estén viendo la cara de estúpida. Si quiere jugar, pues juguemos, no me va a volver a ver la cara.

Tengo que salir de aquí cuanto antes, marqué al ascensor y esperé unos minutos, ¿Que tanto puede tardar en llegar el ascensor?

Anna, cálmate un poco.

Mi Regalo De BienvenidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora