¿Quién dijo que sería fácil? / Jacob Black y tú. [Terminada]

(75) No me sueltes.

Transcurrieron los días, exactamente 4, he seguido sin saber de los Vulturis.
Todos me han notado extraña, especialmente Jacob, me conoce demasiado bien como para saber cuando algo me inquieta o oculto algo, o ambas cosas.
No me sabe bien mentirle ni fingir que todo está bien cuando no es así, aunque sin él saberlo consigue calmarme, con cada abrazo, cada beso, cada 'te amo'...

He tratado alejarme de Edward para mantener esto oculto.
Me pregunto a todas horas si seguir con todo este papel, podría ser una trampa, pero, si está en juego la vida de las personas que amo prefiero sacrificarme.

-... no crees? -La voz de Bella irrumpió en mis pensamientos.

Dirigí rápidamente mi mirada hacia ella quien me miraba expectante, parpadee un par de veces antes de hablar.

-Esto...sí, si claro.

Bella estudió mi rostro con detenimiento.

-Ni siquiera estabas escuchando. -Era una afirmación.
-Lo siento... ¿puedes repetir?
-¿Que demonios te pasa últimamente? Estas como en tu mundo, pérdida en tus pensamientos.

Me quedé callada unos segundos, desvié la mirada de sus ojos y suspiré.

-Solo estoy inquieta por el tema de la tela negra que encontraron.

Aunque ya sabía más que de sobra que pertenecía a los Vulturis, seguramente mandaron a uno de los novatos a hacer la labor, pues uno de la guardia no sería tan descuidado de dejar un trozo de tela.

Además así si alguien olía su aroma no podíamos reconocerlo.

-¿Segura que no ocurre algo más?

Traté de enfrentar su mirada y de sonar lo más creíble posible.

-Segura. -Fingí lo mejor que pude una sonrisa.

Agradecí que justo en ese momento Liv apareciera por la puerta.

-Mamá mamá. -Corrió hacia mí. -Mira, he encontrado algo. -Comenzó a tirar de mi blusa.

Como las otras veces, seguramente sería algún nido de pájaro o algún animal que haya visto y le haya llamado la atención, preferiría eso a seguir con la conversación de Bella.

-Voy cariño.

Miré a Bella quien estaba seria, después de nuevo a Liv y tomé su mano, ésta me guió hasta el jardín, Renesmee estaba tratando de trepar un árbol mientras Rosalie no le quitaba el ojo de encima.
Iba a seguir caminando cuando topé con alguien.

-Cuidado, señorita despistada.

Alcé la mirada para ver a un Garrett sonriente.

Carlisle le había invitado a quedarse aquí el tiempo que quisiera por lo que aceptó estar unos días.

Él me preguntó que qué hacía en Port Angeles a tales horas, le dije que estaba haciendo unos recados, no pareció muy convencido con mi respuesta pero no volvió a sacar el tema.

También le pedí que les dijera a los Cullen que yo le había encontrado a las afueras de Forks ya que él venía para acá.

-Es tu culpa por estar ahí.
-Dejemoslo en empate.

Asentí con una sonrisa, Liv le saludó alegremente y después volvió a tirar de mí, me despedí de Garrett quien siguió su camino y Liv me guió dirección al bosque.

-¡Mira mamá!

Entre el césped reposaba un sobre blanco con unas letras negras, me tensé y me aproximé rápidamente para cogerlo.