Capítulo XIII

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- ¡No! - Roger estaba a punto de llorar.
- ¡No entiendo! ¡Me va a ir muy mal! - Se lanzó contra John quien sostuvo a Rog antes de que se cayera.

- Tranquilo, Roger. Es sólo una tarea. - Freddie intentaba calmarlo.
- ¡Es que no comprendo nada! - Lloriqueaba en los brazos de John, Brian lo tomó por la mochila y lo atrajo hasta él.

- ¡Ya deja de lloriquear! Ven a mi casa hoy, te voy a ayudar. - Dijo mirándolo a los ojos.
- ¿Eres el arcángel May? - Roger lo miraba desde abajo con admiración.
Todos rieron al ver su reacción tan exagerada

Freddie se acercó al oído de John y le susurró: - Ni ellos se creen que van a estudiar. - John asintió viendo a Brian y Roger empujarse mientras reían.

El cuarteto caminaba junto para ir a clases cuando un trío de chicas entre ellas Dominique se acercó a ellos.

- Eres un idiota, Roger. - Dijo una de ellas.
- Eres un asno. - Le espetó la otra, Dominique ni siquiera le dio una mirada.

- ¿Qué...? - Exclamó confundido, al igual que sus amigos.
- Ay, querido, ignoralas, son un trío tan histérico. Piensan que le rompes el corazón a su amiga y ya te metiste con todas. - Freddie chasqueo los dedos y todos continuaron con su camino.

...

Al finalizar las clases John y Freddie se quedaron un poco más para hablar sobre algo que tenía Fred en mente.

- Escucha, voy a pasar por ti a las siete y media. - Le dijo seriamente.
- ¿... Para qué? -
- Para espiar a Brian y Rog. Ya me están hartando y hoy voy a confirmar que se tienen algo. - Le decía con las manos en el aire.
- ¿Eso está bien? - Preguntó temeroso.
- Oh, cariño, eres tan correcto. - Freddie le acarició la mejilla y lo miró con lástima.

Salieron no sin antes de tomar en cuenta el gran factor de no ser vistos por ellos ya que nada más querían ver lo suficiente para marcar las dudas que tanto tenían.

Cuando salieron se encontraron con Roger subido en las piernas de Brian tratando de tomar algo arriba de los casilleros. Todos se miraron mutuamente.

- ¿Qué? - Preguntaron Brian y Roger.
- ¿Qué? - Dijeron al mismo tiempo John y Freddie. Ambas parejas siguieron su camino.

...

Roger tocó el timbre de Brian, amaba estar con él, pero lo único malo eran sus hermanas.

- Hola... Roggie. Pasa. - Salió una de ellas arqueando la espalda contra la pared.
- Gracias... - Dijo algo incómodo.

Pasó y observó a los hermanos de Brian en el sofá o caminando por ahí, las hermanas al verlo le daban una sonrisa muy "encantadora". Brian bajó por las escaleras para salvación del rubio.

- Vamos, Rog... Ignoralas. - Se quejaba Brian mirándolas mal y agarrando a Roger del brazo para subir a su habitación.

- Me siento mentalmente violado. - Exclamó sentándose en la cama de Brian.
- Agh, lo sé, se les suben las hormonas con cualquier hombre. -

Brian se acercó a Roger para explicarle toda esa mierda, al inicio no entendía porque el rizado se desesperaba, pero es como un cachorro con tranquilidad y cariño aprende rápido.
Un poco más lejos de eso, John y Freddie iban en un auto acercándose a la residencia May.

- ¿Y si nos ven? - Cuestionó Deacy en el asiento del copiloto.
- No lo harán, no te preocupes. - Comentaba Fred si apartar la vista de en frente. Finalmente llegaron, se estacionaron en un punto donde los podían ver pero no a ellos.

- Miralos, sólo estudian... - Dijo Deaks señalando por la ventana.
- Pff, por ahora. Cuando terminen se darán horrible. - Aludió con una sonrisa enorme.

Mientras tanto Roger terminaba de asimilar el tema, y después de ponerlo en práctica un par de veces lo logró.

- Creo que te amo, Bri. - Decía agradecido.
- Puedes agradecerlo de otra forma... - Tuvieron contacto visual un momento hasta que una voz los interrumpió.
- ¡Brian! ¿Puedes bajar? - Era uno de sus hermanos.
- Ya regresó. -

Roger quedó sentado en la cama mirando por la ventana, vió un auto cuyo copiloto le recordó a alguien, pero lo ignoró. Sintió una mirada y volvió la cabeza, en la puerta estaba la hermana de Brian, Tina, todos sus órganos se contrajeron.

- Hola, Roggie. - Se acercó a él de forma lenta, llevaba un short muy ajustado y pequeño de tela, pavoneandoce.
- Ah, hola. - Se levantó de la cama al ver que ella se sentó.
- ¿Por qué tan tenso? - Arqueo la espalda de forma sensual, se puso de pie, se acercó al rubio y pasó sus manos por los hombros de este. Cuando se acercó con intensiones de besarlo en las escaleras se oyeron pasos.

- ¡Mierda! - Gritó molesta y salió rápido, al pasar al lado de Brian lo golpeó en el brazo.
- ¿Qué pasó? - Preguntó el rizado entrando.
- Lo de siempre. - Dijo volviendo a sentarse. Brian le puso el seguro a la puerta.

En el auto, Fred y John se quedaron dormidos después de haber esperado un par de horas a que algo pasará.

- Brian... ¿Crees que pueda...? - Roger señaló la entrepierna de su amigo y luego hizo una seña sugestiva con su boca.
- ¿... En serio? - Preguntó nervioso.
- Sí... - Roger se sonrojo.
- Está bien. - Se puso de pie para cerrar las persianas de su ventana y se volvió a sentar al lado de Rog.

Este lo besó con dulzura, luego se arrodilló para ponerse frente a Brian y quitar su pantalón junto con su ropa interior. Puso sus manos en los muslos de él y se acercó con la mayor cautela.

El rizado echó su cabeza hacía atrás y jadeo mientras acariciaba el cabello de Roger que se movía lentamente, podía sentir la húmeda y cálida que estaba su boca, se mordió el labio para no gemir fuerte.

Suspiró lentamente al sentirlo moverse más rápido. - Rog... Sí, maldición. - Susurraba de lo más profundo de su ser, Roger también jadeaba y esa vibración que sentía al hacerlo era una sensación sencillamente exquisita.

Las mejillas de Brian se sonrojaron al ver a Rog con sus ojos cerrados, con sus enormes pestañas que parecía que lo disfrutaba tanto como él. Acarició el cuello del rubio cuando sintió que se iba a venir, Roger parecía orgulloso y trago todo. Se acercó y besó a Brian rápidamente.

- Wow... - Dijo sin aliento. - ¿Cómo lo haces tan bien? - Continuó.
- Porno. - Respondió levantando sus hombros.
- ¿Quieres qué ahora lo haga yo? -
- Por favor. - Decía excitado.

Brian se puso en la misma posición, le bajó lo que tenía encima y se acercó para tragarse a Roger, este rodeó la cabeza de Brian con sus delgadas manos, acariciaba sus mejillas y cuello con delicadeza, sabía que no iba a durar mucho, y así fue, después de unos cinco minutos se corrió en la boca de su amigo, que como el rubio, se lo trago con gusto. Se besaron de nuevo, moviendo la lengua.

- Sabes a verga. - Susurró Roger en los labios de Brian.
- Tú igual, y no me desagrada. - Se volvieron a unir en esos besos tan pasionales que siempre se daban.

Después de recuperar el aliento Brian se colocó sobre Roger y se tocaron mutuamente, juntando sus miembros al hacerlo. Por otro lado ni John ni Freddie se dieron cuenta de que pasó entre ellos ya que en ningún momento lograron despertarse como ver esa escena.

He Drives Me Crazy ; Maylor/DeacuryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora