XXVI

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En las mentes de todos e incluso en las femeninas tenían una palabra en su mente describiendo aquella escena.

Hermosa

Sin embargo en la mente del ojidorado que la miraba embelesado, tenia una palabra más desde muy dentro de su subconsciente.

Mía.

Una palabra que desencadenará el comienzo de un nuevo destino, problemas y miles de emociones desconocidas, que causará un futuro inesperado e incierto para todo el grupo, y en especial en dos personas que ahora ya estaban entrelazadas.

Narradora

La noche había llegado en aquel bello y tranquilo lugar.

Las estrellas brillaban con intensidad, pero aun con su bello brillo; eran opacadas por el resplandor de la luna, que coronaba en el cielo nocturno.

La joven pelicoral era la única que admiraba tan bella escena, ya que los demás dormían y visitaban el país de los sueños.

La bella mujer quedaba sumergida en su subconsciente mientras cantaba una bella melodía, con una voz en total melifluo.

Tus lágrimas se derraman...
Por los días que no volverán...
El cielo que contemplabas arde tan rojo...
Si te darás cuenta de tus propias fortalezas y debilidades ahora...

Tu no temas.

Sigue los dictados de tu corazón
Ábrete por el viento
Ese viaje será iluminado por el amanecer...

Ahora cumple la antigüa promesa

Noche, ábrete...

Una sola flor cae por la superficie del agua, hasta donde fluirá...
Nadie sabe porque el corazón del rey esta todavía dentro de las nubes...

Como si atravesará...
Las dudas que pasan...
Colocando el arco en la flecha, para disparar muy lejos...

Ondeando tu cabello carmesí
Si has decidido vivir
Rompe te las uñas y hazte cicatrices
Aliméntate para el mañana...

Tu, no lo olvides

Hasta el final del cielo ardiente
Algún día el sueño que viste ese pedazo tuyo despertará

Espéralo...

Tú, no temas
Sigue los dictados de tu corazón
La llama de tu mirada
Cómo si fuera esencial
Continúa siendo tu misma

Intercambiando lazos blancos...

Ofreciendo una oración a la noche azul...

Sembrando semillas verdes...

Abrazando la cosecha dorada...

Al terminar de cantar Ryuumiko, una voz de tras suya la despertó de su ensoñación.

Yona._ Esa canción y tu voz son hermosas... _ dijo la ojimorada embelesada.

Sangre de DragonWhere stories live. Discover now