Capítulo 34

3.6K 275 139
                                    

Pov Peter

Después de lo sucedido con Lissa, mi cabeza daba tantas vueltas como le era posible para marear me aun estando recostado en mi cama.

-¿Qué más quieres de mi? - mire el techo molesto, como si este me fuese a dar una respuesta.

Esta noche es una de esas en las que no podré dormir por la predominante angustia; saber que mi poder depende de la vida de otros me hace sentir especial y al mismo tiempo asustado. A pesar de todo yo no confío en mi, nunca lo he hecho. Siento como si todo en mi vida hubiese sido mi culpa, sin embargo, ahora existe una bocecita que escucho muy poco, la cual me dice que es incoherente que yo piense eso: yo no pedí ser así.

Nunca quise esta vida porque no sabía que la tendría, y aun así estoy aquí haciendo lo que puedo.

- Ya he salvado a todos- suspiré - mil y un veces.

Estoy harto de esta sensación que me ahoga, ya no la quiero aquí. No quiero arrepentirme de nada...

-"¿Por qué lo harías?" - mencionó mi cabeza.

Porque... No lo sé. Me he arrepentido de tantas cosas que creo que ahora busco cualquier escusa estúpida para sentirme así.

¿En verdad quiero arrepentirme de haber conocido a Lissa? Aquella chica que ha sido la unica de crear estas dudas en mi... Estas dudas que por alguna razón me dan la esperanza que jamás sentí. Hace magia, ella es magia... O simplemente ya era tiempo.

Quisiera levantarme y salir corriendo para ser Spiderman una vez más; pero mi cuerpo me pide un descanso y un descanso le daré. Mis párpados comenzaron a pesar al igual que mis ojos a llenarse de tierra, o al menos eso sentía gracias a todos estos días acumulados de estrés.

- Solo, quiero dormir hoy- gire mi cuerpo y sin darme cuenta me deje llevar hasta quedar completamente dormido.

Creo que jamás había dormido como esa noche o tal vez tenía mucho tiempo de no dormir así. Todo estuvo muy tranquilo esa noche, nada de robos, nada de peleas, nada de nada.

La mañana siguiente tenía la misma vibra.

Los autos pasaban tranquilos al igual que el entrar y salir de mi respiración.

- Vaya... Que sensación más extraña- la presión en mi pecho no era tan fuerte, no lastimaba. De la nada un sonido extraño retumbó en mis interiores- tengo mucha hambre- es complicado el decir que simplemente comía por comer y era extraño el día en que el hambre me calase.

Me levante muy rápidamente en dirección a la ducha, sin embargo al momento de abrir mi puerta me tope con la cara de mi tía.

- Peter, cariño ¿A donde tan temprano? - me miró extrañada.

- Ah, yo... Pensaba ducharme

- ¿A las 8 Am? ¿Tú? - asentí- bien, entonces esperare en mi habi...

- No- ella volteo un poco asustada- es decir, ¿crees que podrías prepararme el desayuno? Anda, mientras yo me arreglo- sonreí para ella, por primera vez, de manera sincera.

- Claro. Te haré el desayuno entonces.

- Pero algo bien preparado, como tu sabes. Creo que estoy un poco asqueado del cereal- ella me devolvió la sonrisa.

- ¿Como no estarías asqueado? Niño, no desayunabas otras cosa- soltó una risa- anda ya lávate.

Estaba comiendo muy en paz, a pesar de casi devorar mi plato.

- En verdad estabas hambriento- asentí rápido- respira, Peter. No quiero ahogados.

- Perdón- dije después de pasar el trago- Oye tía - recordé algo- ayer estuve pensando las cosas y, creo que ese periódico me tiene un poco enfermo. Sinceramente me gustaría ser mi propio jefe y con esto quiero decirte que pronto quiero volver a las escuela para terminar mi universidad- ella, que tenía una taza de café en la mano, se ahogo unos segundo con el debido a la grata sorpresa.

Te Siento (Andrew Garfield y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora