𝗣𝗔𝗜𝗡 ━━ ❝Porque prefiero sentir dolor a no sentir nada.❞
Mei creía estar condenada por las circunstancias de su vida, hasta que alguien le gritó en el rostro que podía ser diferente. Había renunciado a cosas que creía banales, como los sentimien...
Las rondas finales: ¡Byakugan contra jutsu clones de sombras!
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Después de tanta espera, ansias y días de entrenamiento, el día de la última fase de los exámenes chūnin por fin había llegado. Mei debía encontrarse con Masaru y Shigeru en el centro de la Aldea para poder ir juntos hacia el lugar donde se realizaría la fase final. Y si no quería llegar tarde, tenía que apresurarse.
Se vistió rápidamente. Había cambiado su uniforme habitual para los exámenes. Llevaba una camiseta sin mangas, de cuello alto de color morado con el símbolo del Clan Uchiha en la espalda y calentadores de brazos blancos, junto con pantalones cortos y debajo unas mallas negras hasta la rodilla. Su banda ninja, como siempre la llevaba sobre la frente, y su cabello estaba un poco más largo que antes.
Al estar lista se colocó su porta shuriken en la pierna derecha y se aseguró de que no le faltara nada. Como era costumbre desayunó algo ligero, puesto que no podía pelear con el estómago vacío, pero tampoco demasiado cargado.
Salió del departamento cerrando la puerta detrás de ella y comenzó a avanzar saltando de techo en techo. Al llegar al punto de encuentro se encontró con que ambos ya estaban allí esperándola. Cayó de pie delante de ellos, asustando levemente a Masaru, quien se encontraba distraído.
—Buenos días.
—Hola, Mei —saludó el castaño, con una mano en su pecho debido al susto.
—Buenos días, pequeña —saludó Shigeru—. ¿Vamos?
Ambos jóvenes asintieron, empezando a caminar en dirección a la arena. Tenían el tiempo suficiente como para ir caminando tranquilamente, así que eso hicieron.
Al llegar al lugar, se encontraron con los equipos diez y ocho, además de Neji, Tenten y los hermanos de la arena. Hablaron un rato todos los de Konoha, sin embargo, Mei estaba un tanto distraída de la charla. No veía a Naruto por ningún lado, así que supuso que aún no había llegado, cosa que la preocupó ya que el suyo era el primer encuentro. No dejaba de mirar hacia la puerta esperando ver la cabellera rubia del chico.
Por otro lado, su hermano tampoco parecía estar por ningún lado. Pero él no le preocupaba demasiado ya que estaba con su sensei y, por lo poco que sabía sobre Kakashi, no era alguien muy puntual, pero solía llegar en el momento preciso.
Sus pensamientos se vieron interrumpidos por un gran bullicio que provenía del exterior de la arena, su mirada curiosa se movió en dirección a la puerta sin poder evitarlo. Estaba a tope por personas vestidas de naranja. Mei entrecerró sus ojos al ver que algo salía disparado hacia el centro de la arena. Golpeó su rostro con su mano al identificar el objeto.
—No puede ser cierto —murmuró—. Qué idiota.
Negó levemente y se acercó al rubio, tendiéndole su mano para ayudarlo a pararse. En ese momento el censor, que resultaba ser Shiranui Genma, un tokubetsu jōnin, les pidió que despejaran la arena, yendo a la "sala de espera", por llamarla de algún modo. Los únicos que permanecieron allí fueron Naruto y Neji, quienes se enfrentarían en el primer encuentro.
