Capítulo 16

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*Holiwis. Desde aquí te doy una recomendación. Los capítulos están desordenados porque wattpad esta loco, si bb, te recomiendo que los busques. Igual está enumerados beisa. Disfrute no más. *

—Recojan los balones. Apuren chicos, es hora de volver a casa.

Agarré uno de los carritos, auto encargándome de reunir los conos. Todos estaban ayudando, la práctica había terminado temprano por asuntos personales de la entrenadora. Además, mañana es sábado y no hay práctica. Y era mejor para mí.

Hoy día Doménica, tendrá una audición importante. Al recordar como anoche, estaba prácticamente gritando de la emoción debido a la noticia, me recordaba lo emocionada y nerviosa debe estar en estos momentos. Era bueno que se presentaran nuevas oportunidades, como dice el dicho, ¿no? Una puerta se cierra y otra se abre.

Lleve el carro al cuarto de implementos. Al regresar a la cancha, una sensación extraña invadió mi cuerpo al notar que todo el equipo estaba esperándome. «¿Qué se traen manos?»

Alce la ceja en interrogante. Antonio habló:

-—¿Pedro, cuantos años cumple mañana? —Saco un cinturón.

Abrí los ojos asustados entendiendo a donde iba esto.

—Diecisiete. —Se acercaron todos con malicia.

—¡Whou, calma! ¡Eso es traición, deshonra hermano! ¡Chicos, cálmense!

Salí corriendo por mi vida y mi trasero, quizás para por la segunda. Los ocho jugadores estaban detrás de mí, hasta que lograron atraparme. Era callejón sin salida. Sus risas diabólicas me confirmaban que iban a disfrutar esto.

¡Se supone que se felicita!

—Tranquilo hermano —hablo relajado —, solo respira y apreté el trasero.

Reí. —Claro, como si eso fuera ¡Agh!

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Sobe mi pobre trasero. Esperaba con ansias, que se acercara el cumpleaños de Pedro, se las devolveré todas.

—Allan, ¿estás bien? —Agarro mis manos mientras sonreía. Esta hermosa como siempre, eso está de más decirlo. —, luces adolorido, la práctica de vio ser dura hoy.

Suspire. —Ni te lo imaginas.

—Número ocho, alístese. Falta poco para que salgas.

—Anda, ya mismo me toca presentarme. Será mejor si lo ves desde las sillas que desde acá. Quiero que seas consiente de que tendré éxito. —Asentí. Le pellizque la nariz deseándole suerte.

Avance por las sillas. No había muchas personas, sin embargo, era lo normal para estas audiciones. Lo sé, desde los quince.

Ambos nos conocimos desde niños, pero nos llevamos desde esa edad, cuando fuimos compañeros de banco en la clase de Lenguaje, fue donde ambos nos dimos cuentas de las cosas en común que teníamos y no podíamos parar de hablar por horas.

Y ¡Bam! Mejores amigos.

Doménica salió, apenas terminó la otra bailarina. En una posición de puntillas, empezó la música ¡Y valla que barre con todas!

Su presentación es limpia. Con ambas manos parecía, que dibujaba, dejando a la imaginación de los espectadores. Un split perfecto presentó. Tenía buena flexibilidad. Ella tenía su propio toque mágico.

—Hola Allan.

Mire por encima de mi hombro a la voz. Es Joel, no está con Nadia ¿seguirá insistiendo? Pierde su tiempo.

—No sabía que te gustaba esto. —Comentó sentándose a mi lado.

—Solo acompaño a una amiga.

—Si, a Doménica Espinosa —Mis alarmas se encendieron. Se supone que es de tercer año ¿Cómo la conoce? —, es linda ¿no?

Apreté mis puños molestos, tenía que fingir demencia cuando de mis sentimientos se tratase. —Estas perdiendo tu tiempo, esta con un universitario. —musite mirando al frente.

—Lo sé. Él de, la página de corazones rotos, —fruncí el ceño, viendo mi confusión me paso su móvil.

La página pertenecía Liam. Su contenido era desagradable, tenía un ranking de cuantas chicas había tenido, subió una publicación de cual quieren que sea la siguiente. Ese puñetas. Y la mayoría del comentario decían: Doménica Espinosa. Más abajo esta esa vez que se besaron en el cuarto. Eso no es tener dignidad. La sangre no tardó en hervir. ¡Esto es pasarse! Liam es un imbécil, hacer esto por likes y seguidores y peor aún si la utiliza a ella. Es caer bajo y demasiado, hacerle esto a una persona que conoce. ¡Agh!

Solo le estoy haciendo un favor.

Claro, ahora entiendo el favor. Él tiene más seguidores, y ella su romance de hadas. No puedes cambiar a un playboy, eso es jugar con fuego y querer quemarse.

—Solo piénsalo Allan. Si te unes a nosotros, podrás vengarte de Liam por esto, así te quedas con Doménica ¿no? Todos estúpidamente estarán felices. —le pasé su móvil.

Estoy enojado. Con Liam, por imbécil y Doménica por ofrecerse a esas tonterías infantiles. Esto no se quedará de esta manera, algo tengo que hacer.

—Toma —Me paso un papel —, estaremos el lunes en este bar, si te interesa ven ahí Allan. Es injusto que Liam te siga quitando cosas.

Lo guardé. No puedo creer, que este reconsiderando esta idea. Es estúpido, nada bueno saldrá de esto eso lo puedo asegurar.

Si mamá estuviera viva ¡agh! Ella sabría darle un jalón de orejas.

«No lo sabes, nunca la conociste.»

Tranquilo. Mañana cumplirás diecisiete lo que tanto soñaste. No podría salir mal.

Un día  antes de los diecisiete.

La verdadera pregunta aquí es: ¿Están listos?

¿Y si te digo que te extraño? [EN REVISIÓN]Where stories live. Discover now