Dominado por Faith

capitulo 21

—¡¿Qué? ¡¿Cómo que le pego?! —pregunté impactada y enojada mientras colocaba el teléfono en alta voz.

—Ella... ella le comentó a Luke sobre hablar contigo y preguntarte lo que pasó y él se enfureció con ella.

—¿Estás corriendo? —pregunté mientras Chris me miraba.

—¡Me persiguió con el mismo bate con el que te partió el brazo! ¡Ese tipo está loco! –Gritó asustada—. ¡Voy a la casa de Erin!

—¿Aún lo conserva? ¿Y mamá? ¿Dónde está?

—No lo sé, ella me dijo que corriera y me negué a hacerlo hasta que él comenzó a correr hacia mí con ese bate —estaba llorando.

—¡Cálmate Cristo! Ve a casa de Erin y llama a la policía.

—¿Em serio no puedes venir? Faith, la cosa esta pesada, ella intentó convencerlo después de que salió lo del señor Samuel en las noticias pero él... ¡¿Cuál es su puto amor por ese tipo?!

—No lo sé pero tengo que descubrirlo.

—Te dejo —respiró más tranquila—. Voy a ver quién puede ayudarnos.

—Bien, cualquier cosa llámame.

Colgué y miré a Chris.

—¿Qué debo hacer? —pregunté con la voz pesada y cansada.

—¿Te partió el brazo con un bate? —preguntó Chris completamente sorprendido.

—Si...

—Cuéntame bien esa historia —me exigió.

—Después de que terminara con Gordon por lo del trio y eso él y yo tuvimos "la discusión"

—¿"La discusión"?

—Fue una discusión en donde él dijo muchas cosas, que era una tonta por dejar a Gordon, que era una mala novia que no lo complacía, que me merecía lo que ellos me hicieron, que yo era una mala hija por dejarlo sin pensar en el o en mama y yo le grite que ya no lo consideraba mi padre, esto le molestó mucho, estaba ebrio, llevaba como dos días bebiendo y estoy casi segura de que también estaba drogado porque él me miro y no lo reconocía —una lagrima se deslizo por mi mejilla—, se fue al ático, agarró un bate de su época como jugador de baseball, corrió hacia mi cuarto y me comenzó a golpear con eso —no era una sola lagrima, era un mar de lágrimas lo que salía por mis ojos—. Hubo un momento en que yo atravesé el brazo porque me dolían mucho las piernas y él golpeó con tanta fuerza que se partió inmediatamente.

Agarré su mano y le hice tocar la pequeña cicatriz que tenía en mi brazo.

—Yo lo patee con todas mis fuerzas y lo hice caer, corrí hacia las escaleras para salir de la casa y el muy maldito me empujó, después de eso no recuerdo nada, me desperté en el hospital al día siguiente con el brazo enyesado, una contusión en la cabeza y el tobillo torcido ¿Y sabes qué es lo peor?

—¿Qué? —preguntó él con tristeza.

—Que estaba sola en el hospital, mi madre solo estuvo conmigo en la noche y se fue en la madrugada porque tenía que hacerle el desayuno a su esposo, y Cristiana, estuvo encerrada por días en su habitación, tenía diez años y había visto a su padre convertirse en un animal ¿Cómo podría culparla? salí del hospital a la semana y cuando llegué a casa ellos actuaban como si nada hubiera sucedido, el reporte del doctor decía que me había caído por las escaleras en un acto de descuido y eso provocó la fractura de mi brazo, y tuve que fingir también, por Cristiana, fingir que eso nunca había pasado, debía mostrarme fuerte para ella fuera fuerte también.