Dominado por Faith

capitulo 67

Yo la observé con los ojos completamente abiertos, sorprendida por su pregunta y sobre todo por el enojo que salió de su voz inmediatamente la hizo.

—¿Quién te dijo tal tontería? —fue lo primero que salió de mi boca.

—Bueno... Dan me dijo que—

—Maldita sea —puse los ojos en blanco.

—¿Entonces ustedes no han estado juntos?

—Diablos, por supuesto que no.

—¿y por qué Dan dijo eso?

—Porque es un envidioso y un malcriado, por eso.

—Es que... ¡No lo sé! Tadeus es tan sensual.

—E intimidante...

—¿Tú también te diste cuenta? —me miró con una sonrisa ¿a esta chica le gustaba esa faceta de él?

—Oye Hanna, me caes bien y porque me caes bien te lo digo desde ya, que estés interesada en Tadeus está mal.

—Sé que está mal pero es que me atrae mucho ¿A ti no... no te atrajo?

—Es complicado, cuando conocí a Tadeus Chris y yo estábamos distanciados y si me pareció atractivo pero al final del día tu primo fue quien robó mi corazón, además descubrí que es un imbécil.

—Tadeus nunca se fijara en mí ¿Cierto?

¿Acaso su cerebro estaba omitiendo todo lo que le dije?

—No lo sé, no hablamos mucho que digamos.

—Por favor no le digas a Chris ¿Sí? Sé que él nunca aprobaría algo como eso y no quiero que le digan a mis padres.

—¡Hermanita mira! ¡Luciérnagas! —habló Kala llamando nuestra atención.

Mi teléfono empezó a vibrar sobre mi pierna, era Dick, me coloqué de pie y me alejé para contestar.

—¡Hey! ¿Qué sucede? —lo saludé.

—Escucha Faith, solo diré esto una sola vez y espero no tener que repetirlo.

—Habla —le pedí nerviosa.

—Voy a ser padre...

—¡¿Qué?! ¡¿Qué tu qué?! —grité nerviosa.

—¡Te dije que no lo repetiré!

—¡Pe-pero se suponía que la prueba dio negativo y...!

—¡Si ya lo sé! Pero fuimos al doctor y le hicieron un examen de sangre y... ¡Maldita sea Faith! Estoy que me cago en los malditos pantalones.

—¿Y es que acaso no se estaban cuidando?

Dick guardo silencio.

—¡¿Acaso que esperabas que sucediera?! ¡¿Qué resurgieran flores?! —lo regañé.

—¡Ya entendí! ¡No me regañes más!

—¡Solo te advierto Dick Miller que yo debo ser la madrina o te patearé las pelotas!

—¿Y quién más va a ser la madrina? ¿Abigail?

—Obvio no... ¡rayos! Ruégale a Dios que esa mujer no se entere.

—Sabes que me importa una mierda sus sentimientos ¿Cierto?

—Lo sé, prometo ir a visitarlos pronto ¿sí? Estoy en una reunión con la familia de Chris.

—Saludes al maldito ese y dile que te embarace rápido para no sentirme tan solo en esto.

Yo guardé silencio.