capitulo 48

27K 1.9K 644
                                    

Al darnos la vuelta vimos a Tadeus con sus manos en sus bolsillos y con una típica sonrisa de "si, las enamoro a todas ¿y qué?"

—Hemos estado comiendo como locos ¿Ya probaste los pasteles? —le preguntó Chris.

—No soy muy fan de los pasteles, aunque me han dicho que están buenos.

—Están deliciosos —habló Chris—. ¿Por qué no vas a probarlos?

¿Acaso lo estaba echando?

—¿Me estas echando? —preguntó Tadeus algo sorprendido.

—No te estoy echando —dijo Chris como si nada—. Solo espero hacerte cambiar de opinión sobre los pasteles.

Si, lo estaba echando.

—¡Chris! —Gritó el señor Ricci acercándose a nosotros—. Es un placer verte acá ¿Cómo está tu madre?

—Está bien, señor, inventándose negocios de la nada como siempre.

—¿Y tú, Tadeus? ¿Cómo estás? Escuché que compraste una bella casa en Los Ángeles.

—¿Te irás a vivir a los Ángeles? —preguntó Chris algo sorprendido.

—Lo estoy pensando seriamente, pero no te preocupes hermano, será después de concluir el negocio.

—¡Cierto! Que tienen negocios...

E inmediatamente pasé a un segundo plano, tal vez sea por el periodo, o por sentir que no encajaba en la vida de Chris como debería, pero en ese momento me sentí mínima, me sentí perdida y algo aburrida, no estaba entendiendo nada de lo que ellos estaban hablando y cuando quería hacer alguna pregunta era interrumpida por el señor Ricci o por Tadeus ¿Lo peor? Chris no lo notaba, estaba tan absorto hablando del futuro restaurante que apenas si sostenía mi mano.

Hubo un momento en que la soltó, Tadeus poco a poco me fue cercando hasta que me dejó por fuera de la especie de circulo que habían hecho, retrocedí despacio, tan despacio que Chris ni siquiera lo notaba, cuando me di cuenta ya no escuchaba lo que estaban hablando y muchas personas se atravesaban entre nosotros, miré hacia todos lados buscando un rostro conocido pero no, Gilian era la única y estaba tan ocupada comiéndole la boca a su novia que sería vergonzoso interrumpir, caminé por el lugar alejándome más y más de Chris y me adentré en el paseo por el huerto para recoger manzanas.

El paseo era en una pequeña zona del huerto, para entrar tenías que cancelar la módica suma de veinte dólares, lo cual no me pareció mucho teniendo en cuenta que ayer gasté más en una prueba de embarazo, agarré un cesto y empecé a caminar por el improvisado camino, tomaba las manzanas más jugosas y verdes posibles para que no se dañaran tan rápido, me tomé mi tiempo para agarrar cada una.

A las ocho de la noche el huerto se estaba colocando oscuro y solo unas luces de navidad amarradas a los arboles iluminaban el camino, escuché personas corriendo hacia mí y cuando me di la vuelta unos adolescentes pasaron empujando a todos los que estaban ahí incluyéndome, mi tobillo se doblo un poco por el alto del tacón y caí al suelo ensuciándome las mangas de mi suéter.

—¿Estás bien? —preguntó una chica corriendo hacia mí y ayudándome a colocar de pie.

—Si —dije sacudiéndome un poco—. Los adolescentes son unos idiotas.

—Idiotas es una palabra muy pequeña —dijo ella con mucha molestia mientras me ayudaba a limpiar los pantalones.

Nunca había visto a esta chica, era pelirroja, con su cabello cortado por los hombros y la cara llena de pecas.

—¿Te conozco? —le pregunté mientras ella me ayudaba a recoger las manzanas que se habían caído.

—No me conoces pero yo si te conozco a ti —dijo con una sonrisa—. Tú eres la novia de Chris... por cierto ¿Dónde está ese tonto? ¿Cómo se le ocurre dejarte sola?

Dominado por FaithWhere stories live. Discover now