Dominado por Faith

EXTRA - la versión de Chris

Y se fue, no miró atrás, no dijo nada más además de su declaración de odio, simplemente abandonó la habitación y lo dejó todo cuidadosamente organizado sobre la cama, pero por alguna razón sentía como si alguien hubiera agarrado mi corazón y lo estrujó con fuerza, como  si alguien quisiera sacarle cada gota de sangre pero ¿Por qué? se suponía que esto sucedería, que en algún momento nuestra historia acabaría, que no quería que Faith se enamorara de mí, nunca fue mi intención, no podía darle la atención que ella se merecía y requería, además ¿Cómo diablos sabía David sus sentimientos? ¿Acaso ella le contó antes que a mí debido a un arranque de rabia? esa conclusión solo me hacía enojar mas ¿Tanto miedo tenía de perderme que prefirió quedarse callada? ¿Así de importante era yo para ella? porque si era así entonces me sentiría como completo tonto... no, como un maldito.

Salí de esa habitación después de un rato de pensamientos y maldiciones hacía mi mismo, una pequeña parte de mi deseaba perseguirla pero otra, mi dominadora y controladora parte me obligaba a no dar un paso hacia la entrada "tú pusiste las reglas, ella las sobrepasó, no es tu culpa" trataba de animarme a mi mismo y fracasando en el proceso al recordar su rostro lleno de tristeza.

Mi cabeza seguía siendo un lío hasta que vi a David y a Dan juntos cerca a la recepción de la boda, David con una sonrisa y Dan con un hielo envuelto en una tela sobre su ojo.

—Debes estar muy contento —le mascullé a David deteniéndome frente a ellos.

—Oye, es la boda de tu hermana, cálmate —me pidió en un tono burlón—. Y si, estoy contento.

—Escúchame bien, maldito hijo de puta —lo agarré del cuello de la camisa con algo de fuerza—. Puede que hayas logrado arruinar lo de Faith y yo pero métete esto en la cabeza...

—¡Chris! —Gritó Lilyth acercándose a nosotros—. ¡¿Qué haces?!

—Puedes intentar alejarla de mí todo lo que quieras pero yo siempre estaré en su mente, en sus pensamientos y cuando yo quiera ella volverá a ser mía.

—Tú fuiste él que lo arruinó, amigo mío —dijo con una sonrisa—. Al final ella se fue y tú sigues aquí ¿O acaso vas a decir que se fue por voluntad propia? ¿Por qué estaba cansada? no, se fue porque la rechazaste, y por lo que le hizo en el ojo a tu hermano casi me puedo imaginar como lo hiciste, así que dime Chris ¿Quién es el hijo de puta ahora?

—¡Basta ya ustedes dos! —gritó Lilyth tratando de acercarse a nosotros pero siendo detenida por Dan, quien empezó a arrastrarla lejos de nosotros.

—Que triste ver como alguien tan valiosa como Faith perdió su tiempo con un maldito como tú, no la mereces Chris, Faith Taylor es demasiado para ti.

—¡David por favor basta! —le pidió Lilyth un poco mas lejos.

—Si, tienes razón, Faith es demasiado para mí —lo jalé del corbatín para alejarlo de la gente y  de mi hermana—. Pero me consuela saber que ella tampoco perderá su tiempo contigo y te lo advierto, como te atrevas a ir a buscarla y tratar de tener algo con ella yo mismo me encargaré de aparecer y de volver su cabeza un enredo, te desenmascararé, haré todo lo que este en mis manos para que ella te odie tanto como probablemente me este odiando a mí, porque no solo la perderé yo, tu también lo harás.

—No lo harás —Alegó—. Recuerda que tenemos a tu padre de las pelotas, te agradezco por no decirle a tu hermana lo que pasó con tu padre y mi familia pero es hora de que yo tome cartas en el asunto.

Se sacudió con fuerza para zafarse de mi agarre desordenando su corbatín.

—¿De qué hablas ahora? —le pregunté con el ceño fruncido.