Andrea Pindter tenía la vida perfecta unos amigos envidiables y un novio que la quería un montón, pero
¿Qué posibilidades había de que sus padres gays se encontraran entre 3,99 millones de personas y decidieran iniciar una relación sentimental?
¿Q...
Otro día en el Anchor Beach, pero ahora que nuestra pareja principal estaba feliz...
¿Qué tal si hablamos un poco de las que se están formando o ya hechas paralelamente? Siempre sin perderle la vista a los protagonistas, lógicamente.
Los primeros en encabezar esta lista eran Mike y Liliana.
Pero antes de hablar de ellos durante ese frío martes de enero del dos mil veinte deberíamos hacer un repaso de su historia, ¿No creen?
Mike y Liliana siempre habían ido al mismo instituto, lo que Liliana era un año mayor que Mike y hasta ese año, que repitió, nunca habían coincidido en ninguna clase.
Su primer encuentro se produjo el sábado catorce de septiembre del año pasado.
Exactamente hacía cuatro meses, cuándo Mike se intentó colar en la fiesta de su hermana y Andrea, ellos se chocaron y no pudieron hablar mucho ya que el gorila de discoteca que vigilaba la fiesta lo había echado.
Para el diecisiete de septiembre ya tenía un crush con ella y se lo hizo saber a su amigo Víctor, durante el entrenamiento de baloncesto y un día antes a su mejor amigo Finn.
Durante mucho tiempo Mike y Lili hablaron y se hicieron buenos amigos hasta que el martes quince de octubre Lili le pidió el favor de que saliera con una amiga suya que lo estaba pasando mal.
Quedó con Tiffany el sábado dieciocho y fue una buena cita, Mike se comportó como un caballero e hizo que la chica pasará una buena noche, algo que hizo que se ganará el corazón de Liliana.
Siguieron hablando y llegó el baile de máscaras una semana después al que Mike invitó a Liliana, esta no estaba muy segura de ir, pero menos mal que lo hizo.
Michael la vio entre toda la gente cuándo llego y así que se acercó a ella y sin pensarlo mucho más se lanzó a besarla, como había planeado hacer si ella iba a la fiesta y desde ese día habían comenzado algo.
Para el baile de Invierno ya eran novios.
Eran una pareja que nadie se esperaba, por eso cada vez que entraban de la mano por el Anchor Beach o se les veían juntos en algún lado se ganaban muchas críticas, pero les daba igual.
Esa tarde había un partido de baloncesto, importante, haciendo que Víctor y Mike estuvieran bastante nerviosos.
Pero los nervios de Víctor se habían desvanecido momentáneamente ya que su novia le había enviado una foto.
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—Siguen siendo unos cursis—carcajeo Mike mientras miraba los mensajes que Víctor compartía con Andrea—Me alegra saber que mis negros favoritos siguen siendo unos bollitos adorables.
—Deberías meterte en tus asuntos—vaciló Víctor mientras se quitaba su camisa para ponerse la del equipo.
Era una camisa de asillas blanca, con detalles azules y rojos, con el nombre del centro en color rojo y el número, en su caso el diez del mismo color, y los pantalones cortos eran rojos.
