Andrea Pindter tenía la vida perfecta unos amigos envidiables y un novio que la quería un montón, pero
¿Qué posibilidades había de que sus padres gays se encontraran entre 3,99 millones de personas y decidieran iniciar una relación sentimental?
¿Q...
En este capítulo hablaremos un poco más de Julia y Ashton.
Un gran cliché en las novelas románticas, pero que en la vida real no se daban, las personas en la posición de Julia Myers suelen ser muy prejuiciosas y ella solo lo era un poco.
Julia y Ashton se conocieron, como todos sabemos, el viernes trece de septiembre del año que había acabado hacía tan solo dieciséis días, Ashton se paró a hacerse el machito con ella y con Andrea y le salió mal porque lo que se recibió fue una vacilada por parte de Julia Myers, que todavía me sigue pareciendo legendaria.
Para el viernes veintisiete, de ese mismo mes, ya tenían una mejor relación.
Ashton trabajaba en la cafetería favorita de Julia y hablando allí, con él, se dio cuenta de que era un buen tío, la invitó a unas carreras de motos en las que él corría y cuándo huían de la policía él le robo un beso algo que entusiasmo a la joven Myers.
Ashton se enteró de la edad de Julia y dio un paso atrás, dieciséis años frente a sus veinte le parecía demasiada diferencia, pero como Julia siempre consigue lo que quiere él no iba ser una excepción.
Claro que no.
Así que para el baile de máscaras de su familia ya tenían un rollete y para Navidades ya eran novios, de hecho empezaron el dos de diciembre, así que llevaban un mes y un par de días.
Mucha gente no era la que sabía de su relación, ya que Julia tenía miedo de que sus padres fueran unos estirados y odiaran a Ashton sin motivo.
Por otro lado Ashton ocultaba a Julia a los miembros de su banda, porque Los Águilas no veían con muy buenos ojos las relaciones fuera de la banda, de hecho estaban prohibidas.
Esos dos no tienen drama que envidiarle a nuestros protagonistas, ellos también tenían un amor prohibido y bastante complicado.
Por la tarde llegó la competición de natación.
Y si me imagino que querrán saber que paso con el fútbol americano pero es algo que no va a pasar, lo sabremos cuándo les cuente la historia de James y Aurora.
El caso, Andrea estaba en el vestuario y Julia la ayudaba a prepararse.
La morena estaba muy nerviosa, era la primera vez que la metían en un grupo grande, de ocho personas y no en un dueto, era la más bajita y la más pequeña de edad ya que todas eran del senior, pero había trabajado mucho y había alcanzado su punto más alto en cuánto a flexibilidad.
Se miró en el espejo y el gorro de pedrería plateada estaba perfectamente colocado, no se le salía ningún pelo, su bañador era en conjunto y también estaba de maravilla, el maquillaje que Julia le había aplicado, obviamente contra el agua, estaba de huevos, así que todo estaba en su lugar.
Solo tendría que ponerse los tapones de la nariz para el momento que se lanzarán al agua.
Andrea miró su móvil por última vez antes de entregárselo a Julia para que se lo cuidará.
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