Huyendo del amor.

Los Williams vs Los Pindter/Simpson.

Capítulo 38.

Lunes 8 de junio del 2020.

Los Williams, esa familia conservadora que no se había tomado nada bien el divorcio de Leonard Pindter  ya que lo consideraban pecado, segundo había rehecho su vida con un hombre que nunca se caso y que encima tuvo hijos que no fueron por la gracia de Dios.

Y ya que Andrea y Víctor fueran novios fue la gota que colmo el vaso para ellos, esa casa ya estaba demasiado llena de pecado y no iban a permitir que su hijo se relacionará con esa familia o ese era el punto de la reunión familiar que mantuvieron ese día.

—¿Pero que decís?—Aaron carcajeó, sin parar—Nunca voy a dejar de ser amigo de Víctor y tampoco de Andrea, lo siento pero no, son las mejores personas que he conocido nunca.

—Pero su estilo de vida—replicó su madre—No es para nada moral.

—No es moral para ustedes, no lo es porque es diferente y les asusta lo diferente.

—Si el señor creo a Adán y Eva fue por algo, si no hubiera creado a Adán y Evo, además de que las relaciones carnales entre hermanos está prohibida—replicó el señor Williams.

—Primero ese comentario es lo más homofóbico que he oído en mi vida—puso cara de desaprobación—Que asco papá que en pleno dos mil veinte siga habiendo gente que piensa así, segundo An y Vic no son hermanos y lo saben de sobra.

—Bueno, solo queremos advertirte de que recogeremos firmas para hacer que los Pindter-Simpson o como se hagan llamar no formen más parte activa de la asociación de vecinos—gruño esta.

Aaron se puso de pie y se largo de la conversación, sin duda no le interesaba nada las porquerías que tenían que decir sus padres de sus mejores amigos y de su familia así que prefirió estudiar para sus últimos exámenes pese a que siempre estaba buscando excusas para no hacerlo.

Ese día era el último entrenamiento de baloncesto del año escolar.

Bueno, más bien era una pequeña fiesta en la que se reunía todos los miembros del equipo para despedirse de los del último curso que emprenderían caminos diferentes en la vida y ahí estaban Mike y Víctor brindando con cervezas junto al resto de sus compañeros y el entrenador, que estaba dándoles un discurso inspirador a los futuros universitarios.

—Siempre serán los guerreros del Anchor Beach—dijo el entrenador bastante afectado por la partida de tres de sus jugadores del equipo principal—Les he visto crecer...

Víctor dejó de oírle y saco su móvil para escribirle un mensaje a Andrea ya que le parecía un mejor plan que estar escuchando a su entrenador desvariando.

Andrea junto a una sonrisa dejo su móvil en la mesa de noche y oyó la puerta sonar, como estaba sola con Ares bajo a abrirla y al hacerlo vio un rostro que no esperaba ver al menos no tocando su puerta.