El comienzo

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Me despierto como cualquier otra mañana, solo que esta vez más nerviosa. Es el primer día de instituto después del verano, el cual he pasado en mi casa y apenas he salido, la verdad no tenía muchas ganas de salir pero Nicole y Lina me han obligado básicamente, a sido un verano sabático.
Para cuando me levanto de la cama, tengo en la mesilla la ropa que me preparé por la noche, la verdad es que es muy sencilla, pero con un toque coqueto por el día que es. He seleccionado una camiseta rosa claro que tiene bordado el borde, unos vaqueros largos y ajustados, por último unas converse rosas que tienen la misma tonalidad de la camiseta. Cuando ya me he vestido y "maquillado" (sencillamente me he puesto un poco de rímel, un gloss y un poco de colorete, no quiero llamar la atención), voy por el largo pasillo hasta llegar al baño para arreglarme el pelo, simplemente lo cepillo he intento hacer unos rizos no muy marcados, me dejo el pelo suelto, pero me llevo una goma por si acaso.
Antes de llegar a la cocina ya se huele a café en el pasillo, y como no, mi madre ya está despierta, arreglada y tomándose un café mientras mira un poco la televisión. Miro hacia la mesa de la cocina, veo que ya tengo mi café preparado, la verdad es que no me apetece mucho por los nervios. Cuando mi madre ve la cara que he puesto, ya sabe lo que estoy pensando.
- Te vas a tomar el café quieras o no. -Contesta al momento.
- Buenos días a ti también. -Contesto. -Mamá sabes que siempre me pasa lo mismo cuando estoy nerviosa.
-Por eso tienes que acostumbrarte a que no sea así.
-Por favor, quiero llegar ya al instituto, solo es un día...
-Solo porque no tengo ganas de discutir, pero entonces almorzarás el doble.
-Gracias. -La verdad no me esperaba que diera su brazo a torcer.
Cojo mis cosas y mi madre me lleva al instituto, el camino se me hace corto. Antes de salir del coche le doy un beso a mi madre y observo la entrada para ver si veo a mis amigas, como era de esperar han llegado antes que yo y me están esperando. Cruzo la entrada del instituto hasta llegar a ellas, se me hace eterno, ya que siento miradas, cuchicheos, y observo a los "grupitos" que para nada he echado de menos.
-¡Hola! -Dicen Lina y Nicole, a la misma vez que me dan un abrazo.
-Hola. -Digo yo con menos entusiasmo.
-¿Presentís eso? -Dice Lina a la misma vez que cierra los ojos.
-¿El qué? -Respondo yo algo confusa.
-Es el comienzo de un nuevo año de instituto ¡y tengo buenas vibras! -Responde.
-Ya estamos con tus presentimientos...Eso dijiste el año pasado. -Responde Nicole, poniendo los ojos hacia arriba.
-Esta vez va enserio. -Responde Lina.
Mientras ellas discuten sobre las ocurrencias de Lina, escucho los pasos de alguien al que se me hace imposible olvidar, y del que reconozco cada gesto o paso. Miro hacia atrás y le veo a él, Adler, va como siempre, con el pelo alborotado, su camiseta negra, vaqueros negros y sus vans, es perfecto en todos los sentidos.
Miro a su cara perfecta, directamente a sus ojos verdes y a sus labios carnosos. Cuando apenas me doy cuenta de que cruzamos miradas, me quedo petrificada, el aparta la mirada rápidamente.
-¿Te gusta, eh? -Dice Nicole
-Sshh. -Le pongo mano en la boca rápidamente para que no termine la palabra.
Las clases son como siempre, lo impactante es que coincido en una optativa con Adler, intentaré que no me distraiga...

JuntosWhere stories live. Discover now