Juntos

Capítulo 7

Cuando es por la tarde sigo de mal humor solo quiero decirle a Joshua lo capull* que es. Bajo las escaleras y le digo a mi madre que me voy a dar un paseo para despejarme, no le dejo que me replique y me voy. Después de andar 30 minutos, estoy frente a la casa de Joshua, parece que no hay nadie, solo él porque solo está su coche. Sin pensármelo dos veces subo las escaleras y toco la puerta con fuerza. Me abre Adler, no me lo esperaba, pero mi cara no muestra emoción ni sorpresa, sigo igual de cabreada. El me mira perpetuo.
-¿Qué haces aquí? -Pregunta él en cuanto me abre.
-¿Y tu amiguito? -Digo cortante.
Sin dejar que abra la boca me abro paso para entrar en la casa, él no me lo impide. Cuando miro alrededor veo que Joshua baja las escaleras y dirige la mirada hacia mi.
-¿Y tú que haces aquí? -Me mira extrañado.
-Eres un capullo. -Suelto sin más.
Adler está detrás de mi pero puedo ver su cara interrogante, Joshua frunce el ceño.
-¿Pero qué coño te pasa? -Responde elevando los brazos.
-¡¿Te das cuenta de lo que le has hecho a mi amiga?! -Me acerco a él amenazante. -¡Si era la primera vez no pasaba nada! ¡¿no?! -Prosigo.
-¡Estaba borracho no sabía lo que decía!
-¡A nadie se le ocurre decir eso! Tenias un calentón y solo querías un polvo y dijiste lo que se te paso por la cabeza para convencerla ¡cabrón! Se las estas haciendo pasar putas.
-Que yo sepa no la obligué, eso es que tu amiga es un poco suelta. -Se ríe en mi cara.
La rabia me supera cuando las palabras salen de su boca y mi reflejo es pegarle un guantazo en la cara. Se nota que no se lo esperaba, porque me mira perplejo, pero se recupera al instante y va hacia a mi. Adler reacciona y me coge de las caderas para separarme de él y dejarme a su espalda. Yo me dejo llevar, tampoco me esperaba eso de mi.
-Ya está bien. -Dice Adler mirando a su amigo.
-Si le gusta jugar pues juguemos. -Dice Joshua acercándose.
-He dicho que ya vale. -Adler lo empuja suavemente del pecho.
-Llévatela de mi casa. -Dice Joshua mientras se va por las escaleras.
Adler me lleva sujetándome de la espalda hasta la salida.
-¡Ocúpate de tu error, es tu problema, no solo suyo! -Grito antes de que Adler cierre la puerta a sus espaldas.
Empiezo a caminar por la calle, Adler me coge del brazo.
-¿A dónde vas tan rápida? -Me dice riéndose.
-¿De que coño te ríes? -Sigo enfadada, aunque desahogada.
-Eehh sin insultar que yo no he hecho nada. -Sigue riéndose.
-¿Quieres dejarme en paz? -Sigo andando, pero me coge de las caderas y me atrae hacia él.
-¿Quieres tranquilizarte? -Me dice pegado a mi.
-Me quiero ir a mi casa. -Me calmo.
-Muy bien, yo te llevo, tengo ahí mi coche. -Me coge de la mano hasta su coche.
Me subo en el coche.
-Tienes agallas eh. -Dice con una sonrisa en la cara mientras conduce.
-No tantas, pero cuando se trata de la gente a la que quiero... Además no me gustan las injusticias, se tiene que hacer cargo del embarazo él también. -Digo mirando a la carretera.
-No sabía nada, ¿Qué va a hacer?
-Pues no lo sabe, hoy se lo va a decir a su madre. -Cierro los ojos al imaginármelo.
-Que putada.
-Si...
Llego a mi casa, miro a la puerta y veo a Parker. Me mira cuando llego en el coche de Adler.
-Tienes visita. -Sonríe Adler.
-Si, gracias por traerme. -Salgo del coche.
Adler se va con el coche y me quedo sola con Parker en mi jardín.
-¿Quién era ese? -Me pregunta.
-Un amigo. -Respondo.
-Ah, te quería decir algo. -Me mira a los ojos.
-Pues dime. -Lo miro.
-Llevo mucho tiempo pensándolo, estoy seguro de lo que siento pero no de cómo explicarlo.
Lo miro frunciendo el ceño, sospecho lo que va a decir y no quiero que lo haga.
-Te quiero Minna, desde hace mucho, pero no me he atrevido a decírtelo hasta ahora. Y quería pedirte que fueras mi novia.
Todo este tiempo sabía que el sentía algo por mi, pero nunca me lo había dicho, y ahora no sé qué hacer. Tengo claro que no lo quiero, pero cómo se lo voy a decir sin que esto cambie las cosas entre nosotros.
Me quedo pensativa sin mediar palabra por un minuto, estoy asimilando sus palabras.
Por fin logro decir algo.
-Yo... -Cuando esa palabra sale de mi boca, veo como Parker se acerca a mi para darme un beso. Mi reflejo es apartarlo del pecho y girar mi cara. Noto como se desvanece su pecho, me da mucha pena, no quería reaccionar así, pero no me esperaba que se abalanzara. Lo miro a los ojos, quito mi mano de su pecho y prosigo:
-Lo siento muchísimo Parker, pero yo no siento lo mismo, para mi eres mi mejor amigo, como mi hermano. -Siento que mi cara es de pena.
-No, no te preocupes. -Dirige la mirada hacia el suelo.
-De verdad que lo siento mucho. -Lo sigo mirando a la cara, pero él no a mi.
-Nos vemos. -Se aleja hasta irse del jardín.
No sé qué hacer, me siento mal, muy mal. Entro a mi casa y me tiro a la cama, estoy agotada. He pensado en escribir a Parker, pero no quiero que hablar conmigo le sea incómodo, así que decido hablar con Nicole.

Hola, ¿Le has dicho a tu madre eso?

Hola, si, lo he hecho.

¿Y qué tal?

Pues creía que iba a ser peor, pero he terminado llorando y creo que eso le ha hecho tranquilizarse.

Bueno, pues entonces me alegro de que haya ido mejor de lo que esperabas.

Si, gracias por todo Minna.

No las des, voy a estar siempre para lo que necesites.

Te quiero, nos vemos mañana ;)

Y yo, nos vemos :)

Decido no hablarle de lo que a pasado hoy, se lo contaré cuando esté más tranquila. Se me viene a la mente Lina, creo que ella no sabe nada, la verdad es que no la quiero dejar al margen, pero es decisión de Nicole si se lo quiere contar.