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MATEO

❁══════❁

Salgo para la casa de Kmi con una noticia que llevaba esperando hacía semanas: hoy puedo ir a Neuen para comenzar el disco.

Estoy ansioso por llevar a cabo este proyecto. Desde que escribí mi primera canción y experimenté la sensación de sentirme totalmente realizado, llegué a la conclusión de que debía hacer un disco, y cinco años después ese sueño se va a hacer realidad.

Espero en la entrada a que salga. De mientras saco el móvil y veo que Nora me ha contestado el mensaje que le mandé ayer por la noche.

Nora

[📷 foto]

Adoro a tu hermano

Rio ante el mensaje, le había mandado una imagen que nos hicimos los tres cuando estábamos en la grada. Emi salía un escalón por encima de Nora e intentaba atarle la bufanda en la cabeza mientras ella reía. Me fijo en su sonrisa y trasmite tanta felicidad que no puedo evitar sonreír como un bobo a la pantalla.

Noto en ese momento la mano de Kmi en mi hombro.

— Ay amigo...

Bloqueo el teléfono y le miro mientras cruzamos la calle.

— ¿Qué pasa?

Llegamos a la casa de Nora y esperamos a que salga.

— ¿Has caído en las redes de la española?

Voy a responderle cuando se escucha un hasta luego e instantes después vemos a Nora saliendo por la puerta.

—Tranquilo, es entendible — me susurra.

Le vuelvo a mirar confuso, ¿le gusta Nora?

٭٭٭

Esa dichosa pregunta me deambula por la mente toda la mañana y eso me enfada. ¿Qué importa? No entiendo por qué me molesta ese supuesto hecho.

Salgo andando rápido hacia la salida del instituto cuando alguien me grita.

— ¡Mateo, espera!

Me giro, veo a Nora correr hacia mi y todo cabreo anterior se esfuma.

— Hola — saludo cuando llega a mi.

— ¿Qué prisa llevas, no?

Le explico lo del disco intentando convencerme a mi mismo de que ese es el motivo real.

— ¿En serio? — para en seco. — ¡Qué bien!

Se acerca a mi y me abraza. La muestra de afecto me pilla totalmente desprevenido, pero ella es tan así, tan imprevisible que le devuelvo el abrazo.

— Cualquiera diría que eres mi mayor fan — rio cuando se separa.

Se ruboriza y un tono rosado tiñe sus mejillas, esta preciosa.

— No, eh... Simplemente me gusta tu música y... que vayas a sacar un disco es... Increíble.

Se ha puesto nerviosa, joder.

— Gracias — me limito a decir disfrutando del momento.

Volvemos a ponernos en marcha y de camino le cuento las canciones que tendrá y algunas de las colaboraciones. Me mira con entusiasmo e interés, algo que me flipa de ella.

Llegamos a la puerta de su casa y me invita a pasar, miro la hora y confirmo que puedo. Todavía falta una hora para que Neuen abra. Me siento en el sofá y dejo la mochila al lado.

— ¿No están tus padres?

Alza la vista y la clava en mi de una manera extraña, como si hubiera dicho algo que no debía.

— No — contesta al final. — Voy a calentar la comida.

Desaparece en la cocina y yo la sigo con la mirada. Cinco minutos después aparece con dos platos de macarrones con tomate que deja en el centro de la mesa con dos tenedores.

— No hacía falta.

— Tendrás que tener energía suficiente para sacar adelante ese disco, ¿no?

Me rio y me siento junto a ella en el suelo.

Se ha cambiado de ropa y ahora lleva un moño desaliñado que deja a la vista todo su cuello. Una caligrafía de color negro orientado en horizontal al lado derecho de su cuello me llama la atención y alcanzo a ver lo que pone: be brave, es un tattoo bastante típico pero viniendo de ella sé que detrás de eso hay una historia bastante profunda.

Se da cuenta de que lo he visto y se quita el moño de tal forma que su pelo cae en cascada cubriendo así de nuevo el tatuaje.

No hago más que descubrir cosas sobre Nora que ella no quiere que haga y eso provoca que huya de mi, como aquel día, pero esta vez no intentaré solucionarlo con un simple mensaje.

tenías que ser tú; truenoWhere stories live. Discover now