XII

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XII

Fiesta

¿Qué demonios? ¿Jisoo? Se preguntó Lisa internamente. ¿Qué demonios? ¿Quién era ella?. Jisoo se había acercado, la tomaba del brazo con mucha fuerza, tenía la ligera sospecha que lo que quería hacer era esconderse tras de su espalda y no enfrentarse a aquella joven. Ahora ella parecía la presa y Chaeyoung un cazador, la rubia levantó una ceja mirando a Jisoo. Sintió como el cuerpo de su amiga tenía un ligero temblor. Eso no era nada normal, Jisoo no dejaba intimidarse por nadie. De hecho era conocida en el ambiente deportivo por su seguridad y sin duda su sensualidad, era incluso más segura y extrovertida que Lisa. Jisoo era una mujer muy bella y esto era significativamente nuevo. .

- Vamos... - dijo la rubia y se acercó a las puertas de cristal dándoles la espalda, abrió la puerta y entró. Jisoo se sostuvo de Lisa con un brazo y la otra se la llevó al estómago. Se veía mal, parecía que iba a vomitar. Lisa sintió pánico. ¿Quién era la chica con la que se había besado hace rato?¿Y por qué rayos la había besado? Necesitaba hablar con Rosé.

Lisa movió a Jisoo para que comenzara a caminar, pero ésta no parecía dispuesta a hacerlo.

- ¿Te encuentras bien?- susurró Lisa, inclinándose un poco al oído de su mejor amiga. La rubia se adentró hasta perderse de vista, la música sonaba muy fuerte con la puerta abierta. Se escuchaban murmullos muy altos, parecía que habían llegado a buena hora.

- Lisa... - dijo Jisoo en un hilo de voz. Parecía que le había costado decir aquello. No se movieron, no pudo mover a Jisoo, ella solo parecía que necesitaba sentarse en un segundo. La mano de la pelinegra le apretaba muy fuerte el brazo y ya no soportaba aquel dolor.

- Respira, respira... - le aconsejó la castaña y tomó su mano que apretaba su brazo. Jisoo respiró con urgencia. Hiperventilaba, de verdad parecía que iba a desmayarse.

- ¿La viste, Lisa? No lo creo, no lo creo... - pronunció Jisoo, sus ojos la miraban sorprendidos. Había un ligero toque de emoción en aquellas palabras. - ¿cómo me veo? ¡Necesito un espejo! ¿Dónde está el baño? - intentó soltarse del brazo de Lisa pero ésta la sujetó con fuerza.

- ¿Qué sucede?¿quién es ella?¿por qué estás como loca? - preguntó Lisa, cada pregunta la hacía poner más ansiosa y comenzaba a molestarse por ello. La rubia no decía nada, Jisoo no parecía estar lista para decirle algo y ella estaba segura que conocía Chaeyoung de alguna parte, pero no podía recordar dónde.

- ¿Van entrar o nos quedaremos en el restaurante? - preguntó la rubia asomándose por la puerta donde se había desaparecido unos instantes. Jisoo y Lisa la miraron. La chica parecía despreocupada, en su mano ya llevaba un vaso con una bebida extrañamente coloreada de rojo y azul.

- ¿Realmente no la conoces? - preguntó Jisoo mirando a Lisa ahora, pero había comenzado hablar en Tailandés. La rubia solo se quedó observando a Jisoo un tanto sorprendida. Lisa movió su cabeza en negación.

- Es la persona más importante en la industria de moda en corea... - dijo Jisoo, miró un instante a la rubia y le sonrió, Chaeyoung se limitó a contestar de la misma forma, pero Lisa podía percatarse que estaba confundida, no estaba entendiendo ni una palabra de la que decía Jisoo. Miró a Jisoo que ahora le sostuvo la mirada, un poco más segura de la situación, a pesar de su sonrojo. Continuó. - Es el rostro más hermoso que encontrarás en cualquier revista... - finalizó Jisoo. Lisa la miró un instante y luego a la rubia, después volvió a mirar a Jisoo.

- ¿Cómo lo sabes si no lees revistas? - preguntó Lisa molesta, seguramente le estaba tomando el pelo. Jisoo la miró ofendida con la boca medio abierta. - Ni siquiera estoy segura que sepas que significa mod.... ¡ah! - Jisoo no dejó que terminara la frase, le había dado un golpe en el estómago con el reverso de la mano que tenía libre.

BridgesWhere stories live. Discover now