No te acerques a Uriel [COMPLETA] [Editando]

Capítulo 19

Astrid había llegado a su casa cuando el reloj marcó las 2 de la madrugada.

No podía creerlo, el año acababa de empezar y muchas cosas pasaron en un lapso de dos horas. Todas ellas causándole una leve explosión de emociones a Astrid.

La chica entró a su pequeño departamento y se tiró en el mueble viejo de color rojo que había en la sala, se quitó las botas negras y toda prenda que traía excepto su blusa y pantalón.

Astrid estaba cansada, cansada de todo. Estaba cansada de no poder ver a su madre en la cárcel cuando ella quisiera, estaba cansada de comparar a Dankev y a Uriel, estaba cansada de ser perseguida por ese acosador y por último estaba cansada por el hecho de que ya su amiga no estubiera con ella.

Las lágrimas decidieron apoderarse de ella y Astrid le dió paso para que salieran. Ya no tenía que contenerse, estaba triste.

Sierra había muerto.

Su celular sonó a un lado de ella y la chica se giró hacia el, por las lágrimas no podía leer bien quién era que estaba llamando.

—¿Aló?

—¿Dónde estás?

Astrid sintió su estómago revoltearse al escuchar su voz. Era ronca y había que admitirlo, también seductora. Tenía mucho tiempo sin escucharla y eso estaba empezando a hacer efecto.

—¿Para qué quieres saber, Uriel?

El chico soltó un suspiro detrás de la línea que se escuchó algo distorsionado para Astrid, alejó un poco el teléfono para recuperarse y luego volvió a él.

—Quiero verte —confesó.

—Lo siento, pero no estoy de humor hoy —la voz de la pelirroja estaba apagada.

—¿Pasa algo?

—Si, Sierra está muerta —soltó de repente— Y creo saber quién fué.

Uriel tardó un tiempo en responder, minutos en donde Astrid empezó a sospechar de él.

Si no respondes en quince segundos eso quiere decir que eres tú el asesino— Pensó ella.

—¿La policía está investigando? —preguntó el chico rápidamente, sin haber pasado los quince segundos.

Astrid no respondió, sólo colgó el celular y lo puso de nuevo a un lado de ella. La cabeza le iba a explotar y en serio necesitaba saber cosas.

Las últimas palabras que dijo Sierra en su llamada con Astrid no tenían sentido, pero no había que pasar algo por alto. Ella había mencionado a Uriel.

Astrid estaba 30% segura de que Uriel tenía relación con el asesino, pero también había un 55% por ciento que decía que no. Es decir, algunas veces Uriel ayudó a Astrid para atrapar al acosador. ¿El chico se estaba delatando a sí mismo? ¿por qué?. También había un 5% que decía que el acosador no era Uriel, sino otra persona. ¿Quién? Era algo sin respuesta.