🥀O5🥀

2.5K 460 116
                                    

El día era fresco en la manada, la pequeña brisa que los había visitado por la mañana había dejado humedad a su paso, pero aún así cada integrante del lugar se encontraba ansioso porque el tiempo pasara y llegara el tan ansiado ritual de emparejamiento a la siguiente pareja que lideraría.

Park Chanyeol estaba nervioso y más de una vez había tratado de huir y escabullirse a la habitación de Baekhyun, pero sabía que su madre lo reprenderia alegando de que aún no era tiempo de verlo. Suspiró y terminó encorvandose en su asiento.

—¿Se puede? —escuchó decir tras la puerta y él sólo bufó yendo a abrir por si mismo— te ves terrible.

—Gracias hermanito, me alegra saberlo —gruñó con sarcasmo. JiMin se carcajeó y sin pedir permiso se abrió paso a la habitación.

Ya dentro sonrió comprensivo al notar el semblante que se adueñaba del rostro de su hermano mayor. Chanyeol siempre había sido transparente con sus sentimientos, algo que cualquiera en la manada podía notar.

—No estés nervioso —trató de animar— verás que en menos de lo que pienses estarás lejos disfrutando de tu luna miel con Baekhyun.

—No tendremos luna de miel, JiMin —siseó y terminó revolviendo su cabello— no podemos dejar descuidados la flor de nuestro cachorro.

El Omega recordó ese detalle y terminó asintiendo. Bufó cuando empezó a sentir los nervios de Chanyeol y simplemente se acercó al alfa a tratar de acomodar correctamente la corbata que estaba hecha nudo.

—Debiste aceptar la ayuda de mamá para vestirte, estás desastroso —masculló y se alzó un poco de puntas para peinar el azabache cabello del mayor.

—Es vergonzoso que mamá haga eso —dijo y agradeció cuando JiMin le ayudó a terminar de arreglarse— papá también se había ofrecido pero me negué, no quiero estar escuchando sus sermones que sólo me hacen sentir más nervioso.

JiMin rió bajito al imaginarse los relatos largos que a su papá le gustaba hacer, los cuales siempre tenían como propósito darles una lección de vida.

—Creí que ayudarías a Baek a alistarse.

JiMin asintió junto a un puchero y ofreció el saco a su hermano.

—La señora Byun y mamá me lo prohibieron porque según ellas debo saber lo agonizante que son las horas antes de la boda en la mía propia —bufó— realmente quería ayudar a Baekhyun, pero supongo que tú necesitabas más ayuda, ¡Estás solo! Necesitas a alguien que te ayude.

—YoonGi quedó en venir —se justificó al notar la mirada acusatoria de su hermano— supongo que ocurrió algo para que se demorase.

—Oh él esta con papá —asintió para si mismo al recordar al beta ayudar a su padre a cargar algunas flores que habían sido obsequios de cada manada— le tomará tiempo venir.

Chanyeol asintió comprendiendo y caminó hasta la mesita al costado de la cama.

—¿Me ayudarías? —cuestionó hacía el menor y extendió el broche de una flor de orquídea que debía llevar en su traje.

JiMin asintió sonriente y no pudo evitar sentirse nostálgico porque su hermano estaba apunto de casarse y el tiempo había sido demasiado pequeño como para detenerse a pensar en todo lo que dejaban atrás.

—Sin duda la orquídea es el sello perfecto de Baekhyun —comentó sonriente.

Chanyeol estuvo de acuerdo, después de todo la flor que había concebido al Omega era sensualidad pura, atributos que sin duda Baekhyun había adquirido.

Flores en manos de YoonGi ; YoonMin/윤민 Where stories live. Discover now