T2 capítulo 11

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Estaba siendo conducido a la casa de Jack mientras él hablaba.

Seguramente Scarlet y Kai se molesten cuando sepan la situación en la que me metí solo para pasar un poco de tiempo con Dami, pero es un castigo que estoy dispuesto a aceptar.

-Es aquí -declaró el pelirojo apuntando a un edificio bastante antiguo.

Nos encontrábamos fuera de la ciudad, por lo que esto me da mala espina. Cuando se me abrió la puerta supe de inmediato cuatro cosas que le molestan al moreno.

La temperatura debe estar cerca de los 30 grados, la habitación está mal distribuida causando incomodidad al moverse en ella, las ventanas fueron tapadas con palos y la alfombra es sinceramente horrible.

-¿Te gusta? Lo decoré yo mismo -mostraba alegre. Eso explica muchas cosas, también andaría de malas si viviera acá -no entiendo cómo a mi novio le molesta -aguanté las ganas de matarlo para que Dami pueda vivir.

-Lindo hogar -mentí por amabilidad.

-Gracias. Vamos a mi habitación, disculpa el desorden -me guío a un pasillo a la derecha, era la segunda puerta. ¿Desorden? Parece que hubiera aterrizado mi padre aquí luego de una pelea contra cada villano que se me pueda ocurrir.

Yo comparado con este sujeto soy el amo y señor de la limpieza, líder de la orden del perfume ambiental.

-¿Muy mal? -la sola pregunta ofendía a quien viera esto.

-¡¿Es en serio?! -grité incrédulo -¡Esto tardará semanas en arreglarse! -me comenzaba a desesperar, ya sé cómo se siente Dami -¡¿Eso que está en el techo es un trozo de pizza?!

-Ya sabía que lo había puesto en algún lugar -parecía aliviado de alguna extra forma.

-Me vas a ayudar, ¿Verdad? -estaba a punto de negarme, esto era demaciado.

Al voltearme empieza a sonar el celular del dueño de este basurero.

-¿Aló?  Hola, ya estamos con mi amigo en casa... -¿Hablará con Dami? -¿En serio? -lucía sorprendido y feliz -¿Alguna vez te he dicho que eres el mejor? Gracias y nos vemos cuando vuelvas -se despidió y colgó.

Yo me limité a verlo confuso.

-Era mi novio -esas palabras de su boca me dan ganas de vomitar, aunque el olor podrido de este sitio no ayuda -dijo que nos va a traer una sorpresa para la cena, y que te agradece por ayudarme con este "chiquero" -habló moviendo los dedos para señalar que él no está de acuerdo con la forma de describir su espacio. Siendo honesto, esa palabra es bastante acertada.

-Comencemos, o vamos a morir del olor que tiene este lugar antes de poder mejorarlo -el cabeza de fósforo me pasó una bolsa mientras se quedaba con otra.

-No está tan mal... Oye -me voltié depositando unas latas de refresco en los desechos -cuando nos conocimos me dijiste que no veías a tus amigos y que te llevabas mal con tus padres, pero el simple hecho que estés aquí para ayudar me dice todo lo contrario. Eres una buena persona Jon, si tus amigos y familiares no lo creen, ellos tienen el problema -se mostraba amable y comprensivo...

¡No Jon! Él es la última persona en quién debes ver el lado bueno. Secuestró a Dami, lo controla, trata de alejarlo constantemente de tu lado y es el homicida de miles de personas, probablemente.

Aunque en ese video decía que solo lo quería proteger, que no le gustaba que "jugara" con los sentimientos del de ojos esmeraldas...

¡Lo está tratando mal! ¡Escuchamos de la boca de la víctima que no le gusta estar ahí!  Vimos que lo manda y le baja constantemente el autoestima, estas cosas deben ser una fachada para ocultar su lado demoniaco.

Antes de seguir esta batalla mental le sonreí y volví a recoger desperdicios.

Sé que la forma no es la correcta, pero se ha mostrado relativamente amable conmigo ahora, no me cae bien, pero si logramos llegar a un acuerdo para liberar al hermoso árabe podríamos perdonarlo...

¡¿Perdonarlo?! ¡¿Perdiste la cabeza?! Eso es algo que no vamos a hacer, él se merece los peores castigos que podamos pensar, o ¿Ya olvidaste que se enoja con Dami por no querer tener relaciones?! ¿Qué va a pasar si un día le obliga como nosotros fuimos obligados a dejarlo cuando volvimos por ayuda?... Sería otra historia o ¿Perdonarías al sujeto que violó a la persona que más amamos?

No lo hizo...

Aún no lo hecho, pero un día se va a cansar de ser rechazado.

Pero para ese momento ya habremos rescatado a Damian.

Eso no lo sabes, ¿Y si hoy es la noche? Podría ser hoy, mañana, pasado, en una semana ¡No lo sabemos! Y nuestros amigos ya nos avisaron anoche que tardaría más tiempo de lo esperado ver la estúpida cosa que tiene en el cuello. Ahora mismo puede estar chantajeando a nuestro novio y esa es la tal "situación" que lo prohíbe a terminar con ese hijo de  su madre.

-¿Todo bien? Te noto callado -pronunció la persona más odiada por mi mente en este momento.

-Sí, no te preocupes, solo me concentraba en botar todo rastro de suciedad -me traté de explicar.

-Muchas gracias, de verdad -habló con una sonrisa - por cierto... D está por llegar con la comida.

-¿"D"? -pregunté por el raro apodo, su nombre es demaciado perfecto para ser suplantado solamente con la inicial.

-Así le digo, no le gusta ya que dice que "tiene un nombre por alguna razón". Yo considero que es un sobrenombre tierno -no paró de dar sus excusas para no llamar al de tez morena por su nombre porque escuchamos la puerta abrirse.

-Ya llegué, traje comida China -abandonamos las bolsas en el cuarto, seguí a Jack al baño para ambos lavarnos las manos, no noté que estaba lloviendo hasta que ví la imagen más perfecta en este planeta.

Damian había dejado la comida en la mesa, se veía empapado, de su cabello caían gotas delicadamente en su cara y hombros, la camisa al igual que su pantalón se encontraban pegados a su cuerpo delineando su trabajada figura.

En medio de mi babeo por él tomé la toalla del baño y me quité la sudadera que llevaba puesta, quedando en camisa, para entregárselas con una sonrisa.

-Gracias -pronunció muy cerca de mi rostro mientras sonreía.

Siempre a tu lado Where stories live. Discover now