Capítulo 35. Su Majestad No Está Feliz, ¡Su Majestad Está Un Poco Enojado!

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Mientras pronunciaba estas palabras, ambos se quedaron estupefactos.

Shen QingXian inmediatamente se dio cuenta de lo que estaba diciendo... Y de repente, se sintió algo extraño.

Gu JianShen sintió cosquillas en su corazón y sonrió levemente.

Aunque sabía bien que se trataba de una tarea, no pudo evitar sentirse conmovido.

Gu JianShen lo abrazó y se inclinó, inhalando el aroma en el cuello de Shen QingXian: "ShiShu, ¿por qué no vamos a la cama y consumamos nuestro matrimonio?"

Shen QingXian lo apartó: "¡Sigue soñando!"

Gu JianShen lo miró fijamente y después se rió: "¿No somos un hombre y una mujer? ¿Por qué no podemos consumar nuestro matrimonio?"

Shen QingXian lo miró y se rió fríamente con un ja ja ja.

Gu JianShen estaba extremadamente entusiasmado: "Es una broma, no te preocupes por eso, no sólo quiero poseer tu cuerpo, me voy a casar contigo como es debido y te tomaré como mi única esposa".

Aunque sus palabras eran sinceras, Shen QingXian quiso confirmarlo: "Si no vienes mañana, voy a regresar a la Montaña WanXiu".

"No es como si no hubiera querido venir". Gu JianShen sonrió miserablemente: "Me temo que tan pronto ponga un pie en el Palacio, me echarán a patadas".

Shen QingXian estuvo a punto de responder, cuando de pronto escuchó pasos fuera de su habitación.

Gu JianShen volvió a hablar: "El guardia llegó".

Shen QingXian estaba atónito: "¿Entraste sin permiso?"

Gu JianShen respondió: "No tuve otra opción, si no venía a verte, moriría"

¡Aún podía decir estas tonterías en un momento así! Shen QingXian lo empujó a su cama, pero cuando lo tocó, sintió algo pegajoso en su brazo.

La habitación estaba llena del olor a incienso, pero como Shen QingXian ahora era un mortal, podía sentir levemente el olor a óxido de la sangre: "¿Estás herido?"

Gu JianShen negó con la cabeza: "No es nada, es sólo un pequeño rasguño".

Shen QingXian no le dio mucha importancia a este asunto, lo más importante era encontrar un lugar para poder esconderlo.

Los pasos se escuchaban más claros y cercanos, Shen QingXian se apresuró y limpió la habitación cuidadosamente, sin dejar rastros.

Una tenue luz de vela se reflejó en su puerta, y la voz de un guardia sonó desde afuera: "Señorita, ¿está dormida?"

Shen QingXian habló con un tono perezoso, e hizo que su voz sonara molesta: "Es tan tarde por la noche, ¿qué quieres?"

El guardia respondió con un poco de vergüenza: "Los de la puerta izquierda nos informaron que un ladrón irrumpió en el Palacio GuoGong, temíamos que la señorita se encontrara con ese malvado".

Shen QingXian le respondió: "No hay nadie en mi habitación, así que, vete y déjame dormir".

Gu JianShen aún estaba escondido bajo las mantas, pero no pudo evitar acariciar bruscamente su cintura.

Shen QingXian contuvo sus impulsos de querer patearlo lejos.

El guardia, por supuesto, no se atrevió a entrar en su habitación, al escuchar que su tono de voz sonaba normal, decidió irse: "Entonces, descanse, este subordinado le pide disculpas".

Shen QingXian no respondió.

Había pensado que todo estaba bien, pero quien diría que escucharía las palabras pronunciadas al unísono: "Madam Li viene hacia acá".

¿Quieres Ir Al Cielo? Enamórate PrimeroWhere stories live. Discover now