Capítulo 14.

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Taehyung no era de tomarse las advertencias muy enserio, siendo sinceros lograba evadirlas perfectamente sin preocupaciones. Pero todo cambiaba si de su perrito se trataba, joder si es qué cuándo recibió aquella llamada de Seokjin en la mañana, diciéndole que había un asunto importante que discutir sobre Jungkook pareció que su alma abandonó su cuerpo.

Observó la forma en que el menor dormía tranquilamente en su amplia cama, esbozando una media sonrisa al recordar lo ocurrido horas antes en plena madrugada, dónde Jungkook apareció apretando fuertemente su conejito de felpa contra su pecho, vestido en aquella pijama rosa estampada de ositos panda, restregando uno de sus ojitos mostrándose asustado ante la fuerte tormenta que caía despiadada en la ciudad de Seúl.

Jeon pidió, casi suplicó poder dormir con él, causando que Kim no pudiese negarse, levantándose de su ancha y cómoda cama abriendo los cobertores indicándole acostarse del lado derecho. Con el menor no dudando cuándo el sonido estruendoso de un trueno resonó apoderándose del silencio sepulcral dentro de aquellas cuatro paredes,— corriendo para subirse al mullido colchón cubriéndose hasta la cabeza apretando su conejito.

Y Taehyung se hallaba encantado, joder, si es qué le resultaba fascinante el modo en que el menor temblaba soltando quejidos casi gemidos involuntarios al pretender lloriquear asustado, causándole por unos instantes, los pensamientos más morbosos e insanos que pudiesen imaginarse, negando quedo terminando por rodar sus orbes grisáceos, relamiéndose los labios para finalmente recostarse junto al diminuto cuerpecito quedándose de lado, observándolo a través de las sombras esbozando una sonrisa burlona.

—No seas miedoso, Kookie.—Exclamó, atrayendo sin pensárselo mucho, el cuerpo del más pequeño a sus brazos, rodeándolo por la cintura preocupándose de arroparlo lo suficiente debido al frío inminente de aquel invierno azotando el territorio.

Así pasó su madrugada, con aquel niño de ojos azules y cabello azabache durmiendo entre sus brazos, aferrándose a Kim cómo si su vida dependiese de eso, llevando el dedito pulgar a su boca chupándolo con inocencia, un gesto puro típico de un infante sin maldad, pero qué ante los orbes de Taehyung y su morbosidad, iba más allá de eso.

Ese mocoso ponía su jodido mundo de cabeza a través de solo simples acciones obsoletas, algo que no carajo, nunca se atrevería a confesar en voz alta.

Taehyung se caracterizaba por ser una puta mente maestra, todos y cada uno de sus movimientos más que por impulso eran por conveniencia. El tipo jamás cometía un error e incluso de hacerlo no lo veía cómo uno si algo lograba sacar de esto, su vida estaba perfectamente estructurada según lo que su retorcida mente le imponía, pues de cierto modo sus impulsos nunca le fallaban y él jamás perdía.

Kim Taehyung era un impulsivo de mierda definitivamente, pero uno jodidamente inteligente y manipulador, una combinación sumamente peligrosa si de un completo demente se trata, pues no hay cosa más peligrosa que un loco silencioso e incluso me atrevería a decir que peor aún si está obsesionado con algo.

—Vante.—Escucha entonces siendo sacado de su ensoñación, parpadeando varias veces antes de fijar sus grisáceos orbes a la expresión preocupada de Seokjin, con este cruzándose de brazos viéndolo al otro lado del escritorio. Eran aproximadamente las siete de la mañana, el silencio aún reinaba en la mansión Kim, casi nadie estaba despierto todavía, el desayuno no había sido servido puesto que el reloj no marcaba las ocho am y Taehyung se encontraba impaciente por regresar a su habitación dónde le esperaba un mocosito azabache aún dormido plácidamente igual que un ángel.—Lamento haberte hecho despertar tan temprano pero las cosas se están saliendo de control,—Prosigue su hermano entonces, mostrándose sumamente afligido mediante el castaño simplemente alzaba una ceja mirándolo, disponiéndose a encender un cigarrillo con tranquilidad dándole una calada rápida.—, hace unos días cuándo vino NamJoon a casa, dejó una carpeta y...

𝐔𝐍𝐇𝐄𝐀𝐋𝐓𝐘 © → Libro 𝐈. TaeKookWhere stories live. Discover now